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embajador de Chile en Estados Unidos, Juan Gabriel Valdés, evitó esta mañana ahondar en las críticas que han surgido en su contra por asistir a la Convención Demócrata durante la campaña presidencial en ese país y entregar su apoyo a la candidata Kamala Harris, quien perdió ante el republicano Donald Trump.
"Ya respondí ayer, no voy a seguir en esta discusión. Acabo de leer algo muy amable respecto al diputado Jorge Alessandri (UDI) y no voy a seguir hablando del tema", sostuvo Valdés a Radio ADN. Esto, porque precisamente la tienda gremialista es la que ha pedido que se evalúe la continuidad del embajador en el cargo.
En esa línea, también desdramatizó los dichos que en el pasado emitió el Presidente Gabriel Boric -en 2020, cuando era diputado-, y él mismo, quien en 2015 tildó a Trump como el "(Franco) Parisi estadounidense" y que el fenómeno tenía que ver con la aparición de figuras "cuasi fascitoides".
"Pienso que las cosas, como dijo ayer el canciller (Alberto Van Klaveren), las opiniones privadas de las personas no ciernen relevancia en este cuadro, sino que las que se dicen como representante del país, y por lo tanto, lo que alguien, yo mismo, o el Presidente, cualquier otro político haya dicho antes de Trump no tiene una importancia mayor a quien ni siquiera se conoce".
"El vicepresidente del presidente Trump (J.D. Vance) lo criticó de manera brutal en Twitter (X) y otros lados, algo así como ocho meses antes de reencontrarse con él y transformarse prácticamente en su heredero. Por lo tanto, yo creo que la agitación en torno a las opiniones previas, políticas, no tiene mayor relevancia aquí".
Asimismo, subrayó que "las relaciones entre los países no son solamente entre gobiernos, sino que participan empresarios, el sector privado, el mundo de los Estados de EEUU, la historia de la relación de los dos países, por lo tanto, cuando estamos hablando de la relación, es algo muy variado, muy múltiple. Podemos tener diferencias ideológicas, con cualquier gobierno vecino, cercano, pero eso no significa en absoluto que no tengamos una política de estado, donde los países se respetan y tienen un diálogo normal".
"Chile tiene una relación excelente con EE.UU. y no tiene ningún conflicto que pudiera llevar a pensar que el gobierno de Trump va a cambiar la relación con Chile", subrayó.
Visa Waiver
Frente a las alertas que se han levantado en torno a la visa Waiver, el embajador descartó que este pasaporte pueda estar en peligro mientras no se convierta en un asunto político.
"La visa Waiver es un proceso de conversación y acuerdo entre dos países y el acuerdo ha sido desarrollado de una manera extraordinariamente eficiente. Hemos logrado entregar información sobre personas que viajan a EE.UU. como nunca antes había ocurrido", destacó. "Si este proceso técnico permanece así y no se transforma en político, no veo razón alguna para cambiarlo, le conviene a Chile y EE.UU.", añadió.
Valdés dijo que el discurso específico de Trump -y lo que ha agudizado los temores- "
se refiere a la migración ilegal y a las fronteras que están descubiertas con los países de Centroamérica y México, no está hablando de un acuerdo entre dos países para fomentar el turismo, porque eso es el visa Waiver, no es un proceso de migracón a EE.UU. (...) no veo que se puedan comparar las dos cosas".
"Si alguien quisiera desde el punto de vista político incorporar esto en el cuadro porque han llegado delincuentes desde Chile que han cometido crímenes aquí, naturalmente que el discurso político permite cualquier cosa como se sabe, pero no veo que ese sea útil para Estados Unidos", afirmó. Esto, junto con destacar que el tema "no está en el radar de EE.UU., está en el radar en Chile. No hay hoy día ninguna razón para pensar que visa Waiver corre peligro".
Triunfo de Trump
Consultado por las razones que llevaron a Trump a quedarse con un cómodo y holgado triunfo, el embajador comentó que "Donald Trump entendió mejor que todos el estado de ánimo de los norteamericanos, transformó sus vulnerabilidades en ventajas, canalizó los miedos y las incertidumbres de una gran parte de población que se vio enfrentada a un proceso inflacionario, la pandemia, la sensación de pérdida de identidad por la inmensa cantidad de población, creo que hay una parte de la población norteamericana que se siente así".
En ese sentido, subrayó que el presidente electo "una persona que no viene de la política y es capaz de someterlo a su dictamen, es un personaje único, de alguna manera porque no hay reproducción posible en el pasado. Ha quedado en una posición espectacular porque tiene el Senado y la Corte Suprema a su favor".
También abordó la gestión de Joe Biden, el presidente saliente, quien a su juicio "fue un gobierno muy bueno, combatió la herencia de la pandemia en términos económicos de la mejor manera que supo hacerlo y lo hizo bien", lo que además va a permitir que Trump llegue en buena situación en esa materia.
¿Por qué entonces la economía es un factor para explicar el triunfo del republicano? De acuerdo a Valdés, esto se debe a que "la gente no alcanzó a recibir el progreso económico que se estaba alcanzando. La gente siguió apretada en los arriendos que subieron muchísimo en el periodo posterior a la pandemia. Son los típicos problemas del tiempo y desarrollo de la economía. Trump supo aprovechar que la gente no terminaba el mes".
Y añadió que hay otro factor relevante: "que el énfasis de Kamala Harris no estuvo necesariamente en la economía. Ella recuperó terreno, pero los norteamericanos pensaron que era mejor tener un presidente poderoso, masculino, que manejara el tema económico, de eso no cabe duda".