El subsecretario de Justicia, Ernesto Muñoz, junto al director Nacional de Gendarmería, Sebastián Urra, se refirieron este lunes al homicidio que sufrió un interno en la cárcel de Concepción, quien fue decapitado por un compañero de celda.
Muñoz, en un punto de prensa, aseguró que el recinto penitenciario no está en manos de los imputados y que el hecho ocurrido en horas de la noche es un caso extremo que no se veía desde hace 40 años en las cárceles de Chile.
"Se ha hablado acerca de cómo esto puede comprometer eventualmente el hecho de que las cárceles están en manos del Estado y en manos de Gendarmería. No lo compromete en grado alguno. Las cárceles en Chile son cárceles que están en manos de Gendarmería. Aquí no hay ninguna cárcel que esté en manos de imputados", dijo la autoridad de Gobierno.
En ese sentido, indicó que el presunto homicida se encuentra aislado de la población penal a la espera de instrucciones del Ministerio Público, como por ejemplo, un posible traslado.
"Hay protocolos que en este tipo de circunstancias se toman no solamente para resguardar la seguridad del penal, sino también de los gendarmes. Acá tenemos situaciones que son bastante extremas y los gendarmes son profesionales y, en este caso, son personas que muchas veces hacen mucho, y nosotros como gobierno hemos estado comprometidos para encontrar los recursos y también para tratar de entregar los recursos necesarios para que Gendarmería pueda cumplir con su labor, tanto desde el punto de vista del personal como de la infraestructura", agregó el subsecretario.
Y agregó: "Hace 40 años que no ocurría algo así en alguna de las cárceles de nuestro país y por lo tanto, sin perjuicio de la investigación, del resultado que pueda surgir de ello tanto del Ministerio Público como de la investigación administrativa, hablar acerca del profesionalismo de Gendarmería en la implementación de las acciones necesarias, en este caso y en muchos otros casos como hemos visto a lo largo del tiempo".