La violencia escolar es una preocupación creciente en Chile y que afecta el bienestar y el desarrollo académico y social de los estudiantes. Según la última Encuesta CEP, la agresión en el entorno educativo ha emergido como uno de los problemas más urgentes que enfrentan los establecimientos del país.
El estudio "Bullying y clima escolar en la última década en Chile" de los investigadores Gabriel Ugarte y Sebastián Izquierdo del Centro de Estudios Públicos (CEP) dio cuenta de relevantes resultados en torno a la convivencia de establecimientos educacionales del país.
En concreto, se analizó la evolución de la victimización física, verbal, social y por internet en estudiantes de 2° medio del país durante la última década, y se entendió bullying como una agresión repetitiva contra algún alumno.
Los datos fueron obtenidos a partir de los cuestionarios personales que se aplican en el Sistema de Medición de la Calidad de la Educación (SIMCE).
Uno de los principales resultados es que el porcentaje de los jóvenes que indican que son victimizados al menos un par de veces al mes subió de 11% en 2012, al 14% en 2018, y a 19% en 2022.
Lo anterior se traduce en que cerca de uno de cada cinco estudiantes reporta haber sido victimizado de alguna forma al menos un par de veces al mes en el transcurso del año. Según los autores del estudio, esta situación tuvo un gran aumento debido a la pandemia.
De acuerdo a los tipos de victimización, las agresiones físicas y por internet –que incluye las redes sociales– son las menos frecuentes. En tanto, la verbal y la social se destacan como las formas más prevalentes de agresión y las que más han crecido en la última década.
Análisis del estudio
El estudio segregó la victimización según sexo, nivel socioeconómico, tipo de establecimientos y ubicación geográfica.
En cuanto a sexo, las cifras son preocupantes. "Prácticamente en la última década se han duplicado los problemas de bullying en el sistema escolar y esto ha afectado con mayor fuerza a las mujeres", explica Sebastián Izquierdo, coordinador académico CEP y co-autor del estudio.
Entre 2012 y 2022, el porcentaje de estudiantes hombres de segundo medio que reporta haber sufriendo algún tipo de victimización un par de veces al mes aumentó en 52%. En el caso de las mujeres, esta cifra se incrementó en 93%, casi el doble de los varones.
93%aumentó el número de estudiantes mujeres que reportaron sufrir bullying al menos un par de veces al mes.
El estudio también demostró que a medida que aumenta el nivel socioeconómico de las escuelas, se observa un incremento en la proporción de alumnos que reportan haber sufrido alguna agresión de forma frecuente.
En cuanto a los tipos de establecimientos, entre 2012 y 2022 todos los tipos de escuelas registran un aumento en el porcentaje de estudiantes que declaran ser agredidos. Sin embargo, este incremento es notablemente mayor en los establecimientos con mejor situación socioeconómica.
En el nivel más bajo de victimización se encuentran los establecimientos municipales, le siguen los particulares subvencionados, y en los colegios particulares pagados se observa el mayor aumento, el cual alcanza el 104%.
En términos geográficos, los niveles de victimización han crecido en todas las macrozonas del país. Sin embargo, llama la atención que el norte fue históricamente fue la zona donde se registraban los niveles más altos de victimización, y entre 2012 y 2022 es el lugar donde menos aumenta el porcentaje de alumnos que declaran haber sido agredidos.
Sobre las posibles explicaciones a este fenómeno educativo, el estudio menciona que las disminuciones en la participación estudiantil y el sentido de pertenencia, junto con un aumento del temor dentro de los establecimientos "sugieren que el ambiente educativo se ha vuelto menos acogedor y seguro para los estudiantes".
Según Sebastián Izquierdo, "este aumento del bullying ha venido emparejado con un peor clima escolar que sabemos que es una variable fundamental para poder mejorar la calidad de la educación desde un punto de vista integral", concluyó.
