La ex Presidenta Michelle Bachelet, la ministra Carolina Tohá y los diputados Vlado Mirosevic y Jaime Mulet.
Emol
"Elijamos nuestro candidato ya. Por favor". Ese fue el llamado que hizo ayer el senador José Miguel Insulza (PS), en medio de la indefinición que mantiene el oficialismo sobre su candidato presidencial e incluso sobre si éste se definirá en primarias o no.
El senador explicó en EmolTV que "el problema que tienen los partidos de izquierda y centroizquierda es que prácticamente no tienen candidatos todavía. El único que tenemos formalmente es Vlado Mirosevic ¿Y vamos a estar así hasta julio? Yo creo que eso es muy peligroso".
Decisión que se ha visto además retrasada por la definición que algunos esperan tome la ex Presidenta Michelle Bachelet, respecto a si competirá o no por un nuevo periodo. Algo que debería ocurrir en marzo o a más tardar abril, mes en que se cumple el plazo del Servicio Electoral para inscribir las candidaturas a primarias.
El tema inquieta también a otros partidos que quieren posicionar a sus propias cartas, ese es el caso del PPD donde han impulsado la postulación de la ministra del Interior, Carolina Tohá.
"En rigor, ella (Bachelet) no ha dicho que va a ser candidata, al contrario. Hay quienes han optado por interpretar sus declaraciones. En los hechos, se generó un escenario que es bueno dilucidar pronto", dijo hace unos días el timonel del PPD, Jaime Quintana, a La Tercera.
La propia Tohá indicó el martes que las definiciones se van a tomar en marzo y apuntó que "hemos tenido tantas experiencias con que los climas de las elecciones tienen movimientos inesperados durante el año en que se desarrollan, basta recordar cuál fue nuestra última elección. Entonces ya no es tan fácil anticipar si es bueno estar mucho antes o después, eso ya entra en el oráculo que no es mi especialidad".
Lo que ven los expertos
Pero, ¿es riesgoso es que el oficialismo dilate su decisión o es simplemente un hecho de la causa? Según el sociólogo y director de tuinfluyes.com, Axel Callís, "el mayor nerviosismo está desde los parlamentarios del oficialismo que son los que están más nerviosos, los que están más ansiosos, porque hay una relación directa entre el rendimiento parlamentario y la potencia presidencial que tenga la lista. El gran riesgo y por eso que hay mucho nerviosismo en la centroizquierda e izquierda es por qué una candidatura presidencial débil o de poca potencia, pone en riesgo los equilibrios en el Congreso y dejaría a la derecha muy cerca en los 4/7 que es para hacer reformas constitucionales".
Además, Callís consideró que la cartas presidenciales que pueden haber, como la del diputado Mirosevic y su par Jaime Mulet, "requieren que pueda haber certeza política para saber si se tiran o no. El caso de Carolina Tohá u otra candidatura incipiente como Jeannette Jara, yo creo que necesitan saber que pueden dar el primer paso y no les va a salir Michelle Bachelet".
Sobre los plazos que se manejan, Callís descartó que sea tarde para una decisión. "En esta época en 2021, todavía seguían Jadue, Lavín y Jiles (como candidatos), había aparecido (Sebastián) Sichel en nuestra encuesta y también estaba José Antonio Kast, quinto o sexto. En nuestra encuesta de marzo del 2021, Boric aparecía con un punto en el onceavo lugar, en mención espontánea. El voto obligatorio obliga a que todas las personas se tengan que informar y yo creo que marzo es un buen mes para definir quiénes van a participar en las primarias".
Asimismo, el analista político Germán Silva planteó que "el tiempo, paradójicamente, le puede jugar a favor ahora al oficialismo si consideramos que la candidatura de Evelyn parece desgastada y la derecha esta dividida entre tres candidatos".
A su juicio, "una campaña corta y que entre con fuerza, puede refrescar el ambiente político e instalarse en la agenda como novedad. Más aún, si fuera Bachelet la carta del ofícialismo. Recordemos que hasta marzo de 2021 teníamos a Jadue y Lavín escapados y Boric no aparecía en las encuestas".
Por su parte, el director ejecutivo del Instituto Res Publica, José Francisco Lagos, opinó que "en el tema de los liderazgos la izquierda ha sido bastante pasiva, entre otras cosas, porque el escenario electoral se ve bastante complejo para quien sea el candidato".
"Una muestra de esta falta de acción es que ni un solo ministro renunció para ir de candidato al Congreso, lo que antes era bastante común", apuntó Lagos.
En ese escenario, cree que "los riesgos de la pasividad y la dilación de la decisión es que el posicionamiento de candidatos con menos conocimiento nacional, se hace cada vez más complejo".
