, luego que el Banco Central confirmara un crecimiento de 2,6% en 2024. El tuit iba acompañado por una fotografía con la entrevista que el economista concedió a El Mercurio en agosto del año pasado, donde sostenía que "Para alcanzar el cálculo del PIB del Gobierno, se necesitaría un 'milagro económico y no hay milagros en la economía'".
Pero el tono irónico de Presidente quedó prácticamente sin piso luego de que Quiroz señalara a Cooperativa que "parece que el Presidente solo leyó el titular de la entrevista, porque lo que yo me refiero ahí, específicamente a un número que se estaba hablando en ese minuto, que se decía que Chile podía crecer 3 o más. Y yo dije que sería un milagro y bueno, crecimos menos, 2,6, que es el punto más bajo de la proyección, pero ok, el 2,6".
-¿Es demasiado optimista la proyección del Gobierno, de crecer 2,6% este año?
"Demasiado optimista (...). Llevamos 1,9% en el semestre, por lo tanto, necesitaríamos crecer 3,3% el segundo semestre. Eso no lo veo".
"Hemos crecido entre 1,8% y 2% en los últimos 10 años. A lo mejor tenemos un segundo semestre muy bueno, pero crecer más del 3% de modo sostenido sería un milagro económico y no hay milagros en la economía".
"La economía hace mucho tiempo que perdió certidumbre. Tenemos temas de burocracia, de permisos, que han llevado a que la inversión esté estancada, las tasas de impuestos corporativos son muy altas, la educación y el capital humano es bajo, la productividad no crece. Esos son los factores que determinan el crecimiento a largo plazo".
Deuda pública
Quiroz es crítico de cómo se ha manejado la deuda pública en el último decenio. "La inversión pública en los últimos 10 años ha caído un 20% en términos reales, (mientras que) los empleados públicos han subido un 50%, con un ausentismo laboral que hoy día es de más de 30 días hábiles, supera al ausentismo del sector privado tres veces", dice.
También observa falencias en cómo se desembolsa dinero en los casi 700 programas públicos que están repartidos en 28 ministerios. "Hay algunos programas que no se pueden bajar, como la PGU, pero nos estamos gastando hoy US$ 1.700 millones en subsidiar el transporte público en Chile. Claramente, nos gastamos miles de millones de dólares en programas que no tienen claro cuál es el gasto administrativo", afirma.
En el Informe de Finanzas Públicas (IFP) del segundo trimestre de la Dirección de Presupuestos (Dipres), el Gobierno indicó que de los 675 programas públicos que pudieron ser analizados, el 26,2% presenta deficiencias en focalización o priorización. Pero Quiroz resalta que la información presentada lleva a creer que estos programas no focalizados son la minoría, cuando, vistos por monto, no es el caso.
"El IFP tiene unos números alegres al final que distorsionan la realidad (...). Dice que el 26% de los programas tiene deficiencia en focalización, pero lo que interesa es la plata que no está focalizada", señala. Según el economista, el dinero que se desembolsa en programas con deficiencia en focalización son más de US$ 20.000 millones, que es "casi la mitad" del gasto en todos los programas que hay.
-¿Cómo llega usted a ese cálculo?
"Cruzando bases de datos".
-El Gobierno podría haber puesto esa cifra en el IFP.
"Por supuesto (...). Yo soy muy justo con el ministro (de Hacienda, Mario) Marcel. Esto viene de hace mucho tiempo, no se originó en este Gobierno. Ahora, no nos engañemos, aquí no estamos haciendo cosas distintas".
Una segunda tabla en el IPF muestra que el 10,8% de los programas públicos tiene un indicador de propósito formulado de manera deficiente. Según Quiroz, esto equivale a US$ 10.000 millones.
-¿Qué medidas podría tomar el ministro Marcel hoy?
"La única manera de resolver los temas fiscales en Chile, y la decadencia en general, es enfrentar a grupos de interés, a quienes están beneficiándose de estos programas (...). No es popular, pero tú no vas a salir de acá si no estás dispuesto a hacer cosas impopulares".
"Es lo mismo que el tema del crecimiento. Hoy crecemos poco. Bueno, no hay milagros. Para crecer tienes que invertir, para invertir tienes que ahorrar. No es popular ahorrar".
Reforma previsional
Esta semana, el Gobierno se abrió a la idea de financiar el alza de los actuales jubilados mediante un préstamo previsional. Este mecanismo consiste en que dos puntos del 6% de cotización adicional se destinen a un fondo, que luego serán devueltos con intereses a los trabajadores cuando se pensionen.
Quiroz advierte que este mecanismo no es gratis. "Es un aumento de la deuda pública. La única diferencia es que esa deuda se le va a dar directamente a los que cotizaron. Pero es una deuda pública, el Gobierno lo tiene que pagar", dice.
-Algunos ven en el préstamo una mejor opción a establecer un sistema de reparto.
"Ese es el problema que tenemos en Chile. ¿(El préstamo) es mejor que el reparto? Sí, puede ser. Pero es mejor no tener ninguno de los dos (...). ¿Por qué tenemos que estar escogiendo entre malas opciones? Aquí hay un ánimo de firmar acuerdos para que se vea que es bueno firmar acuerdos".
Fuera del costo de financiar el préstamo previsional, que no es menor, Quiroz ve una falencia en la lógica de que los actuales trabajadores deban aportar al alza de pensiones de los jubilados. "Quienes están jubilados hoy vivieron en un país donde el ingreso per cápita se doblaba cada 20 años. Los que trabajan hoy están viviendo en un país donde el ingreso se doblará entre 50 y 80 años. Van a vivir en un Chile infinitamente menos dinámico", argumenta.
Un ejemplo es el sistema de salud público, que tiene "muchos problemas de gestión, pero no de recursos". Quiroz plantea cómo será el estado de la salud pública en 20 años más, "si seguimos con este problema de déficit y bajo crecimiento".
-¿Su opción preferente es que el 6% adicional vaya a la cuenta individual?
"La gran mayoría quiere, que, si va a cotizar más, que la plata sea de ellos. Y subir más la cotización es aumentar el costo al empleador. Va a generar un costo en términos de informalidad (...). Sería muy cauto con el ritmo al cual subimos esta cotización, no sé si un 1% por año".
Quiroz se define como un "partidario del sistema de AFP", aunque reconoce que existen algunos puntos que se pueden perfeccionar. Uno de ellos son las comisiones que cobran las administradoras, para lo cual ve una buena solución en la licitación de la cartera de los actuales afiliados. "Yo creo que la licitación va a llevar a costos más razonables, que no influyen en la pensión, pero que sí afectan el mercado laboral", afirma.
"Lo de la AFP estatal yo creo que no aporta en nada, pero si la gente quiere ver una AFP del Estado para que le dé más confianza, no tengo problema. Va a tener que estar muy bien regulado, para que no haya competencia desleal en las licitaciones", dice.
-Las mujeres tienen menor tasa de reemplazo con igual años de cotización que un hombre. ¿Es eso perfectible?
"Las mujeres tienen menores tasas de reemplazo porque jubilan antes y viven más. No es algo que hay que perfeccionar. Si queremos que los hombres, que vivimos menos y nos jubilamos más tarde, pongamos una parte para que las mujeres se jubilen igual que nosotros, es una pregunta política y cada uno tendrá su opinión".
''La economía perdió certidumbre. Tenemos temas de burocracia, de permisos, que han llevado a que la inversión esté estancada, la educación y el capital humano es bajo, la productividad no crece. Esos factores determinan el crecimiento a largo plazo".
''¿(El préstamo) es mejor que el reparto? Sí, puede ser. Pero es mejor no tener ninguno de los dos (...). ¿Por qué tenemos que estar escogiendo entre malas opciones? Aquí hay un ánimo de firmar acuerdos para que se vea que es bueno firmar acuerdos".