En una operación coordinada con la Fiscalía Centro Norte, Carabineros del OS7 realizó allanamientos en cinco domicilios ubicados en las comunas de Santiago, San Joaquín y San Miguel. Además, detuvo a diez sujetos.
A raíz de lo anterior, la policía desbarató a una peligrosa organización criminal internacional dedicada al tráfico de drogas y al porte ilegal de armas.
El persecutor Francisco Jacir, fiscal jefe de la Fiscalía Local de Santiago Centro, dijo que los detenidos "son ciudadanos extranjeros de tres nacionalidades distintas: Colombia, República Dominicana y Venezuela".
El operativo fue el resultado de una investigación que permitió establecer que la banda operaba en las inmediaciones del persa Biobío, en el barrio Franklin, comuna de Santiago.
Su estructura criminal incluía inmuebles de seguridad en distintos sectores de la capital, utilizados como centros de acopio y distribución de sustancias ilícitas.
Además, se incautaron 22 kilos de marihuana en proceso de pesaje, 574 gramos de clorhidrato de cocaína dosificada y una cantidad aún no precisada de ketamina lista para su venta.
La peligrosidad de la organización quedó en evidencia con la incautación de un arsenal que incluía tres pistolas –dos de ellas sin marca y con número de serie borrado–, 67 cartuchos de calibre 9 mm sin percutir y cuatro cargadores.
Asimismo, se decomisaron más de $8 millones en efectivo, herramientas para la dosificación de drogas y dos vehículos utilizados para el transporte y ocultamiento de la mercancía ilícita.
El jefe Zona Oeste de Carabineros, Álex Bahamóndez, señaló que este operativo "es el resultado de una robusta investigación con diez detenidos, una importante incautación de drogas, y todo esto gracias al trabajo que realiza Carabineros día a día, presentes en la población, recuperando los espacios públicos que el ciudadano de bien ha ido perdiendo y esto da los antecedentes de lo que tenemos que hacer como institución".