El matrimonio González-Calleja.
A una semana y tres días del asesinato al matrimonio de
Rodrigo González y María Carolina Calleja en la comuna de Graneros, que conmocionó al país entero, sus hijos Rodrigo, estudiante universitario y Rosario, diseñadora, se la han pasado entre Santiago y Rancagua realizando trámites. Comentan que la juventud del matrimonio está muy documentada gracias a la afición que tenía María Carolina por la fotografía.
En esos recuerdos se les ve siempre abrazados, sonrientes, en la playa, en el campo, en el lago, pero sobre todo junto a sus caballos.
"La talla constante entre ellos era que mi papá le decía: 'Es que tú me ibas a ver a los rodeos'; y mi mamá le respondía: 'No, eras tú el que adentro de la medialuna me pasaba mirando para afuera", dice con una sonrisa Rodrigo. Rosario, por su parte, dice que ya está más tranquila desde que fue el funeral, aunque asegura: "Sé que no se viene fácil, pero ya estoy en paz... dentro de lo que se puede".
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