Usualmente, cuando se aborda la llamada "crisis de natalidad" que enfrenta Chile, se habla de las mujeres que deciden no tener hijos. En efecto, al ser ellas quienes dan a luz, la mayor parte de la atención se centra en las causas por las que deciden no ser madres.
No obstante, entre los múltiples factores que determinan una baja en la natalidad, algunos investigadores también han observado el comportamiento de los hombres en torno a la paternidad, especialmente de quienes desisten de este rol, ya sea, para evitar tener hijos, o incluso entre quienes ya son padres, pero optan por no tener más descendencia.
Una forma de aproximarse a este escenario, es a través de las cifras que dan cuenta del aumento de quienes se someten voluntariamente a una vasectomía.
Si en 2013 los procedimientos de anticoncepción masculina bordeaban los 760 -entre establecimientos hospitalarios públicos y privados-, para 2023 la cifra superaba las 7.500 intervenciones. Entre las razones, hay una mayor conciencia por la planificación familiar, conciencia sobre el impacto del uso de anticonceptivos hormonales en las mujeres, y la idea de una responsabilidad compartida en materia sexual y reproductiva.
Asimismo, tanto hombres que no desean ser padres, como aquellos que lo son, pero no quieren tener más hijos, optan por este procedimiento. Emol conversó con dos hombres que decidieron hacerse la vasectomía, y que dan cuenta de estas dos realidades.
Un tema con "altura de miras" y "más conciencia"
Esteban tiene 42 años y es padre de tres hijos. En octubre de 2024 se realizó la vasectomía, tras pensarlo durante dos años. Según cuenta, el proceso terminó en noviembre con un examen de espermiograma que certifica el éxito del proceso, es decir, corroborar que los espermios no sean fértiles.
"La decisión la tomé impulsado por una petición de mi esposa. Ella me comunicó que no iba a tomar más anticonceptivos y tampoco se iba a operar, y que me correspondía a mí operarme. En consideración a que ella había pasado por tres procesos de embarazo, y que tenemos tres hijos, consideré justo poder contribuir para que nuestra salud, nuestra salud mental y nuestro bienestar sexual pudiese continuar de manera más tranquila", cuenta. Asimismo, dice que fue clave la confianza que le otorgó su médico, en torno a la cirugía y al seguimiento del proceso.
"Los procesos intermedios (de embarazo y crianza) son difíciles y ahora necesitamos nuestro tiempo, a nuestra edad también, tener más tranquilidad para continuar para lo que viene para adelante. Es un tema que hay que mirar con altura de miras".
Esteban señala que si bien están felices como pareja por haber concretado la posibilidad de haber tenido hijos, "los procesos intermedios (de embarazo y crianza) son difíciles y ahora necesitamos nuestro tiempo, a nuestra edad también, tener más tranquilidad para continuar para lo que viene para adelante. Es un tema que hay que tomar con altura de miras", reflexiona.
Otro caso es el de Jaime, de 36 años, y sin hijos. La inquietud por operarse la barajaba desde antes de la pandemia, periodo donde estaba en una relación donde su pareja se inyectaba anticonceptivos. "Ella no se sentía bien al respecto, y también percibía que eso afectaba nuestra vida íntima. Yo nunca quise tener hijos, pero tuve que aplazar la decisión de operarme cuando llegó la pandemia".
Aunque Jaime terminó esa relación, al momento de comenzar con otro vínculo, en 2022, reafirmó la decisión que había tomado hace tiempo. "Con esta nueva pareja, quien tampoco quería tener hijos, acordamos exclusividad, y ahí me operé". El proceso de acercarse a la vasectomía fue a través de amigos o cercanos que ya se habían sometido al procedimiento, "fui preguntando cosas, me informé y supe que mi isapre me cubría el 90%, prácticamente no pagué nada", acota.
A tres años de la vasectomía, Jaime aún percibe que existe "mucho miedo en los hombres a esta operación, porque hay mucho desconocimiento del tema, pero he ido conversando con otras personas que tienen dudas y ya dos conocidos se han operado también. Sé que la decisión es compleja para algunos, aún cuando la vasectomía es reversible, aunque puede variar el porcentaje de éxito en eso. Creo que es bueno tener conciencia, veo a mujeres que toman anticonceptivos por 10 o 15 años, y eso es muy agresivo homonalmente".
"Es clave generar más datos"
El lunes, el Instituto Nacional de Estadísticas (INE) presentó su último reporte de estadísticas vitales, que dio cuenta que en 2023, la Tasa Global de Fecundidad (TGF) -es decir, la cantidad de hijos que una mujer podría tener en su etapa fértil-, llegó a la más baja de la historia del país, con 1,16 hijos. Pero en un panel de análisis, donde se analizaron las cifras, también se apuntó al escenario de las vasectomías.
Esa voz fue la de
Martina Yopo,
doctora en Sociología de la Universidad de Cambridge y profesora asistente del Instituto de Sociología de la Universidad Católica, quien ha investigado temas relacionados a la natalidad, y elaboró un estudio en torno a las intervenciones que ya ha arrojado sus primeros resultados.
"Las vasectomías en Chile han aumentado 887% en la última década. O sea, entre 2013 y 2023, nosotros podemos ver que las vasectomías han aumentado desde 700 y algo hasta más de 7 mil. Entonces, efectivamente, cuando nosotros miramos las transformaciones profundas en torno a la fecundidad y a los nacimientos, siempre lo miramos desde el punto de vista de las mujeres, pero es importante mirar a los hombres, porque efectivamente hay un número creciente de hombres en Chile que o está teniendo menos hijos", comenta Yopo.
En esa línea, añade que "efectivamente se están esterilizando (más hombres) porque no quiere tener más hijos de los que ya tienen, o, como los hombres que nosotros entrevistamos en el marco de nuestro estudio, son hombres que no tienen hijos y que han decidido esterilizarse muchas veces a edades tempranas, en los 20 y tantos, o a comienzos de los 30, porque efectivamente no querían ser padres", precisa la investigadora. "Esta también es una tendencia al alza, de la cual se sabe muy poco y es absolutamente clave generar más datos", subraya.
Incluso, si se quisiera ir más allá, la experta propone otra arista a observar: siempre que se piensa en infertilidad, se intentan mirar datos asociados a las mujeres, "pero efectivamente también hay muchas causas de infertilidad que afectan a los hombres, y esos son fenómenos que en un contexto de baja fecundidad y baja natalidad tendríamos que empezar a mirar y tenemos que empezar a entender".
