El colegio de Profesoras y Profesores dio inicio a una jornada de movilizaciones a nivel nacional este lunes, para solicitar mayores medidas de protección, luego de las agresiones sufridas la semana pasada por dos docentes a manos de estudiantes.
En un comunicado, el presidente del gremio, Mario Aguilar, indicó que el motivo de las manifestaciones es "levantar un clamor para que se detenga la violencia contra docentes y las comunidades escolares. No más violencia, no más agresiones". Hechos que, según él, representan en la actualidad "el problema más grande que enfrenta la educación chilena".
La jornada, que se convocó para este lunes a mediodía, contempla distintas expresiones de movilización —que quedaran a criterio de la docencia de cada colegio—, en las afueras de los establecimientos.
Aguilar apuntó que las situaciones de violencia hacia el profesorado dentro de las aulas derivan de la falta de una "robustez legal que permita enfrentar de mejor manera esto", así como la falta de recursos estructurales, formativos y de personal especializado en el sistema educativo.
"Inclusión queda muchas veces en el papel"
Aguilar remarcó que "la inclusión queda muchas veces en el papel", puesto que debido a la falta de recursos en los recintos, hay una incapacidad para llevar a la práctica las diversas leyes que abordan el aspecto de integración escolar.
"Es correcta la política de inclusión, pero esa política de inclusión queda solo en la declaración, cuando no tiene los recursos, el apoyo, recursos humanos, recursos materiales que se necesitan, y que en la gran mayoría de los colegios aún no están. (...) Al no tener las herramientas ni los recursos, (los docentes) se ven expuestos a tener en su sala de clase casos muy complejos de manejar, y que simplemente no tienen las condiciones para hacerlo", explicó el presidente del gremio en una entrevista de 24 Horas.
Sumado a lo anterior, apuntó a la antigüedad de las normativas existentes destinadas a regular la distribución de alumnos con condiciones especiales en las salas de clases. Entre los que destacó el caso del Decreto 170, encargado de fijar normas para determinar los alumnos con necesidad educativas especiales en los centros educativos.
"Tenemos el Decreto 170, que es el que regula todos estos programas de inclusión, que está muy añejo, que no se ha actualizado. Tenemos que se sobrepasa la norma incluso. La norma dice originalmente que un profesor debería estar en su sala de clases con no más de cinco niños TEA, pero nosotros tenemos casos de hasta quince, porque hay un resquicio que dice que se podrá autorizar un número mayor según necesidad y de eso se ha abusado", acusó Aguilar.
Respecto a la forma abordar de forma eficaz la integración a menores con condiciones especiales, el presidente del magisterio indicó que sería de gran utilidad contar con una mayor presencia de profesionales asistentes a la educación, ya que con un solo docente es imposible, considerando que mientras controla una desrregulación emocional debe, al mismo tiempo, continuar atendiendo al resto del alumnado.
"Lo que ocurrió en Trehuaco y en San Javier no son hechos puntuales, son expresión de un problema que está recurrentemente ocurriendo en muchos lugares del país, y está este caso que tiene que ver con la inclusión, pero está también la violencia de apoderados contra los docentes", dijo Aguilar.
Además de lo mencionado anteriormente, el presidente del Colegio de Profesores cree que otra de las aristas del problema tiene que ver con el currículum escolar, el cual se encuentra "muy focalizado en el rendimiento de pruebas estandarizadas y cada vez menor importancia a temas como el deporte, el arte, la cultura, que sí son atractivos para los estudiantes y que le podrían entregar un mejor bienestar durante su estadía en el colegio".
Aguilar también señaló que un factor importante tiene relación con la violencia presente en la sociedad, que permea los colegios.
Por último, aclaró que el problema de la violencia hacia el profesorado dentro de las comunidades educativas no es una consecuencia de la pandemia, que está tan solo lo agudizó, pero que se viene registrando un aumento de este tipo de hechos desde el año 2015.