Un mes y medio cerrado lleva el acceso norponiente de la estación Cal y Canto de la Línea 2 del metro. En febrero, la estatal decidió clausurarlo temporalmente por la constante inseguridad del sector donde convergen las comunas de Santiago, Recoleta e Independencia. El lugar se transformó en foco de delincuencia, comercio ambulante e incivilidades, según denuncian vecinos y trabajadores, un panorama que se ve agravado por la proliferación de cocinerías ilegales, rayados y basura acumulada, que aumentan la sensación de inseguridad. En ese contexto, fue el alcalde de Santiago, Mario Desbordes, quien informó sobre gestiones del municipio ante Metro para clausurar el portón del sector norponiente, en avenida La Paz. Ello levantó una ola de críticas y un debate sobre espacios públicos "tomados" por la delincuencia. Incluso se acusó un "abandono del Estado" ante ese tipo de situaciones.