Una y media taza de harina sin polvos de hornear; una taza un cuarto de avena; un cuarto taza de azúcar; 1 cucharada de polvos de hornear; media cucharadita de sal; 125 gramos de mantequilla derretida; un tercio taza de leche; 1 huevo levemente batido.
Probablemente la receta más fácil e infalible de scones. Ideal para que incluso los niños los cocinen. Acompáñelos con mermelada y crema batida.
Precalentar el horno a 220C (muy alto).
Enmantequillar la lata del horno o usar una lata de teflón.
Mezclar avena, harina, sal, polvos de hornear y azúcar.
En otro bol mezclar la mantequilla, leche y huevo. Unir las dos mezclas, revolviendo con un tenedor sin sobremezclar.
Poner la mezcla en la mesa, aplastar con las manos hasta dejarlo de 2 a 3 centímetros de grosor. Cortar círculos de 5 centímetros de diámetro y hornear por 12 minutos.
Enfriar levemente, espolvorear con azúcar flor y servir tibios.