ASUNCIÓN.- Paraguay celebró hoy su día nacional del "tereré", la infusión de yerba mate y agua fría que todos los ciudadanos del país, sin importar clase o condición social, toman con devoción y también una jornada de reivindicación con uno de sus principales símbolos culturales: el placer de compartir.
El tereré es la bebida más popular del país, una jarra de agua helada y una guampa, recipiente de cuerno de vaca o madera, cargada de yerba mate, son los complementos habituales de todo paraguayo, esté en su casa, en la calle o en el trabajo.
A nadie se le niega un trago. El tubo metálico con el que se sorbe el agua, pasa de una boca a otra, no importa lo grande que sea el grupo. Siempre hay algún quisquilloso, pero todo el mundo sabe que desde que sale de casa hasta que regrese compartirá su infusión con cualquiera que pase.
El conductor paraguayo tiene prohibido hablar por el celular mientras maneja, pero no hay inconvenientes legales con levantar en la mano derecha, cada dos cuadras, un termo de dos litros forrado en cuero con el símbolo de su equipo de fútbol mientras sujeta con la izquierda la guampa, que deja rebosando de agua y yerba antes de sorber ruidosamente.
La devoción por esta infusión fría no distingue clase ni condición social, en un país con unas temperaturas medias de entre 35 y 38 grados, son pocos los que no caminan con un gigante termo colgando de la mano.
En la más elegante audiencia del Senado o el Palacio de Justicia, en cualquier reunión de oficinistas, en las paradas de los taxistas o entre los vendedores ambulantes siempre habrá algún paraguayo sorbiendo un tereré.
"Es una bebida típica de Paraguay y es bien refrescante, también es una forma de compartir con la demás gente, muy pocos son los que lo toman solos, siempre acompañado porque es una forma de compartir. El paraguayo es una persona muy solidaria", dijo Enrique Álvarez, artesano asunceno de 43 años.
Mientras vende a turistas guampas talladas por él en una céntrica plaza de Asunción, Álvarez explica que la costumbre de tomar yerba mate viene de los pueblos indígenas como el guaraní. "De ahí viene la costumbre de tomar mate en el Cono Sur", recalcó.
"Es nuestra identidad"
Pero según la tradición popular, el tereré se extendió por toda la sociedad paraguaya a partir de la Guerra del Chaco, que les enfrentó con Bolivia entre 1932 y 1935.
Los soldados paraguayos estaban acostumbrados a tomar la yerba con agua caliente como en la cuenca del río de la Plata, es decir, Argentina y Uruguay, además de los "gauchos" del sur de Brasil. Pero el Chaco es un lugar muy árido y caluroso, y los paraguayos dejaron de calentar el agua para no dejar señales de fuegos en las trincheras, y se popularizó el tomarlo frío, algo que tras la victoria se convirtió en todo un símbolo.
Paraguay celebra hoy el Día Nacional del Tereré, declarado así por el Congreso oficialmente en 2011 para honrar al brebaje.
Al mismo tiempo, la declaración fue una reivindicación nacional, ya que la yerba es común en varios países de la región, aunque es originaria de Paraguay, cuestión siempre debatida en cualquier esquina o bar de una ciudad donde haya brasileños, paraguayos, argentinos o uruguayos juntos. "El tereré es nuestro, la yerba mate es nuestra, es nuestra identidad", dijo Rita Álvarez, también artesana dedicada a fabricar termos y guampas, uno de los principales productos de consumo de los paraguayos.
Tal es la convicción de identidad con el tereré que los vendedores del popular Mercado 4 de Asunción se están organizando para presentar a la Dirección Nacional de Propiedad Intelectual de Paraguay (Dinapi) un pedido para que reconozca a la bebida como una invención paraguaya, después de haberse registrado como marca comercial en el vecino Brasil.
Algunas versiones apuntan a que la yerba mate ya era consumida por los indígenas guaraníes de Paraguay y algunas zonas de Brasil, y que recibe su nombre popular de la palabra guaraní "mati", que significa "calabaza" y hace referencia al recipiente donde se colocaba la yerba.