SANTIAGO.- Son varios los
zoológicos internacionales que organizan campañas públicas para
nombrar a sus animales más importantes, algunos con la intención de reunir fondos para futuros proyectos, otros para acercar a la gente a la fauna, y hacerlos sentir más
comprometidos con el medio ambiente y su cuidado. La semana pasada, el zoológico británico
Hemsley publicó en sus redes sociales una campaña para el Día de los Enamorados, en la que llamaban a las personas a
bautizar a sus cucarachas con el nombre de algún
ex novio y así poder vengarse de la mala experiencia.
El zoológico australiano
Wild Life, también inició un concurso con la misma intención, pero para nombrar a su
serpiente más venenosa. Kelú, Elvis, Simón, Freddy Mercury, Bowie, Canela, Ñamku, son los nombres que hoy tienen algunos de los animales del
Zoológico Nacional del Parque Metropolitano de Santiago. Las razones son variadas y van desde sus orígenes en otras instituciones internacionales, hasta significados en
mapudungún. La Coordinadora General del recinto,
Andrea Caiozzi, cuenta que el propósito principal de bautizar a los animales del centro, es poder
crear un vínculo con sus cuidadores, veterinarios, biólogos y con la gente que visita a diario el zoológico, ya que los convierte en
embajadores de su especie y así las personas se comprometen más con su cuidado.
"Por ejemplo, nuestro
panda rojo Kelú (rojo en mapudungún) es todo un personaje tanto acá como en Japón, donde también lo siguen porque eran fanáticos de sus padres, y es muy querido.
Él representa a los demás pandas rojos que se están extinguiendo en el Himalaya", explicó Andrea.
Kelú, oso panda rojo.Además, cuenta que al
pingüino Elvis, lo llamaron de esta forma debido a que sus cuidadores creían que se parecía al famoso cantante estadounidense. En las visitas de las personas al centro, realizan charlas donde se presenta al animal con el fin de que cuando las personas visiten playas y vean a algunas de estas aves dañadas o perseguidas por un perro, se
comprometan más con su cuidado y conservación, al acordarse de Elvis.
La mayoría de los
animales responden a sus nombres gracias a que los cuidadores realizan entrenamientos con refuerzo positivo, es decir, a través de la entrega de premios donde se les enseña a responder al apodo específico asignado y algunos incluso a
silbidos especiales, lo que facilita el adiestramiento al momento de hacerlo con muchas especies a la vez.
Orígenes y significados
A pesar de que intentan bautizar a todos los animales para mejorar el vínculo con sus cuidadores,
no todos tienen nombres. Según explica la coordinadora, hay casi mil seres en todo el zoológico por lo que es una tarea compleja el asignar a cada uno de ellos un apodo especial. Por ejemplo, hay más de 30 flamencos pero se les identifica a través de
microchips.Respecto a los orígenes que tiene cada nombre, existen distintas
normas internas del zoológico y son principalmente los cuidadores quienes asignan el
apodo a su animal.
Kiwi, mono araña de Geoffroy."Siempre tiene que ser un nombre
agradable, que dignifique a los animales y
nunca se los menoscabe. A pesar de que ellos no lo entiendan, para nosotros es importante el respeto y por sobre todo los que están a nuestro cuidado", afirmó Andrea.
Existen diferentes razones para asignar un nombre específico a cada habitante del centro. En algunos casos se mantiene el apodo que les pusieron en la institución de donde proviene, y así no confundir al animal con uno nuevo, según explica la coordinadora.
En otros casos los funcionarios asignan los nombres por una
característica física o simplemente porque les gusta.
Quién asigna los nombres
Dentro del
ParqueMet no tienen a un responsable de elegir los nombres para cada animal. Esto depende del
vínculo del cuidador o funcionario con su especie, sugerencias que reciben desde empleados y
concursos públicos que se realizan en algunas ocasiones especiales.
Blanca, leona."Algunas veces hemos realizado concursos para ponerles nombres a animales como el panda rojo, las crías de una jirafa, las cebras o animales nuevos que llegan de otras instituciones. Esta es una instancia muy bonita donde el
público se involucra más con los animales, tienen más conexión con la naturaleza y
el cuidado del planeta, lo que es el propósito del zoológico", señaló Caiozzi.
En el caso de los
concursos públicos, la institución hace una
preselección donde filtran para que los nombres que queden como finalistas sean dignos, bonitos y
tengan el respeto que ellos merecen.
Algunos de los más reconocidos
- Simón, rana de Darwin: fue bautizada así por su guarda faunas.
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Newen, águila: nombre de pueblo originario de Chile, asignado por guías educativos.
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Claudito, pingüino de Humboldt: nació con problemas médicos y su nombre fue puesto por un cuidador.
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Tyson, canguro gris: fue bautizado así por su musculosa figura parecida a la del boxeador Mike Tyson.
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Josefina, cebra: su nombre fue asignado por el zoológico holandés de donde proviene.
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Jumbo, elefante: bautizado en honor al supermercado que ayudó a trasladar al paquidermo desde su origen internacional hasta Chile.
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Jorgita, gibón: recibió su nombre de su guarda faunas Jorge.
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Menchi, hipopótamo: su nombre significa Mendoza-Chile, ya que llegó desde Argentina.
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Jany, jirafa: fue bautizada así por su cuidador en honor a la directora actual del zoológico, Alejandra Montalba.
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Kelú, oso panda rojo: su nombre fue elegido a través de un concurso público donde se propuso Kelú, que significa rojo en mapudungún.
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Blanca, leona: recibió su nombre en la institución de origen.
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Kiwi, mono araña de Geoffroy,: en honor a su vínculo con sus guarda faunas Eugenio (Keno), Luis (Lucho) y Williams (Willy).
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Freddy Mercury, varano del Nilo: nombre puesto en su institución de origen en honor al vocalista de Queen.
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Hombre ardiente, tortuga de tierra carbonaria: bautizada por sus guarda faunas debido a que siempre intenta reproducirse con ejemplares hembras.
