La nueva colección
Resort 2020, inspirada en la "alegría de vivir" de América Latina, tiene a la conocida casa de moda detrás de los diseños,
Carolina Herrera, y al
Gobierno de México en una disputa.
Esto, ya que desde el
Ministerio de Cultura mexicano reclaman a la afamada diseñadora Carolina Herrera por el uso de elementos culturales de pueblos originarios en varias de sus prendas, calificándolo como un
"acto de apropiación" por parte de la firma de lujo.
La secretaría de Cultura envió una carta a la diseñadora venezolana y a su director creativo,
Wes Gordon, en que afirma que en varios modelos de la colección se incorporan bordados o tejidos que pertenecen a elementos de tres comunidades precisas, que en unos casos tienen significados particulares, familiares y comunitarios y en otros dan identidad a las mujeres o a un región concreta.
En la misiva se les exige a que "expliquen públicamente
con qué fundamentos decidieron hacer uso de elementos culturales cuyo origen está plenamente documentado, y
cómo su utilización retribuye beneficios a las comunidades portadoras".
Una de las prendas es un vestido largo de colores que su tela está inspirada en un elemento típico de México, el
sarape de Saltillo, y otros artículos están hechos con bordados de la típica flor de cempasúchil, conocida como
"flor de muertos" por su conocido uso en la celebración típica nacional del Día de Muertos en noviembre.
"Se trata de un principio de consideración ética que, local y globalmente, nos obliga a hacer un llamado de atención y poner en la mesa de la discusión pública un tema impostergable en la agenda 2030 para el desarrollo sostenible de la ONU:
promover la inclusión y hacer visibles a los invisibles", dice la carta con fecha del 10 de junio.
México está buscando contar con un marco jurídico que salvaguarde el arte y la creatividad de los pueblos indígenas para evitar que siga el
plagio y robo por parte de empresas locales y extranjeras sin retribuir a las comunidades.
Crédito: AP
