Son muchas las personas que han tenido que llevar sus
oficinas a sus casas, debido a las diversas medidas que han tomado las empresas e instituciones para evitar el aumento de casos de contagio por
coronavirus (Covid-19).
Una situación que para varios no resulta difícil de concretar, pero que para otros, específicamente los que son
padres, se complica al tener que compartir el mismo espacio junto a sus hijos más pequeños y además tener que trabajar en este.
Susana Saravia, psicóloga infantil de Clínica Universidad de Los Andes, sostiene
que lo más importante en estos casos es la
organización en las familias respecto a sus espacios dentro de la casa.
Para Saravia lo primero es que los padres estructuren cómo van a funcionar respecto a sus trabajos desde las casas, es decir,
definir un lugar específico para llevar a cabo sus labores y desde ahí poder crear una planificación en conjunto con los más pequeños. "Con el
home office se genera un quiebre entre el espacio personal y el laboral, y frente a eso es importante que los papás puedan especificar cuál es el espacio de trabajo y que sea distinto del espacio familiar", añade en conversación con
Emol.
Respecto a los más pequeños, la psicóloga recomienda a los padres organizar una
rutina familiar. Algunos ejemplos que entrega, son definir tareas domésticas en las que todos puedan participar;
horarios de estudio, los cuales pueden coincidir con el tiempo que los adultos utilizan para trabajar y dar un orden a las actividades diarias con el objetivo de
armar una nueva rutina, la cual será distinta a la que están acostumbrados.
"Los niños necesitan cierta
predictibilidad, y esto les da una sensación de mayor control y de poder explorar en un ambiente que les otorga cierta estructura, porque la incertidumbre a los niños les genera mucha angustia", explica la experta.
Tareas prácticas
Saravia propone realizar un
calendario familiar en conjunto con los más pequeños, el cual se puede colgar en el refrigerador para que esté a la vista de todos los integrantes. En este, aconseja agregar:
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Horarios: "Incluimos actividades de ocio, de estudio; trabajo de la madre y padre; períodos de siesta; podemos incluir también actividades domésticas donde todos podemos hacernos cargo, y también incluir tiempos de juego libre de niño, es decir que puedan tener sus espacios para jugar en solitario o con sus hermanos".
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Espacio de juego: "Un espacio de juego que los padres puedan establecer. Además, conversar con el niño acerca de este otro lugar que va a ser de trabajo para los padres en casa y que por lo tanto probablemente por esos minutos no va a poder estar atentos al cien por ciento de él, pero que cuando termine van a poder estar pendiente de sus actividades".
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Actividades: "Aprovechar estos espacios para que los papás puedan buscar algunas actividades novedosas con sus hijos. Hoy, la tecnología nos da alternativas de sobra para encontrar qué hacer, podemos buscar ideas en internet de actividades para hacer durante el día y así potenciar la creatividad de nuestros niños".
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Espacio para hablar: "Entregar espacios para hablar de lo que nos está pasando respecto a la situación actual, nacional y mundial. Contarles, en función de la edad, lo que está ocurriendo sin alarmarlos, a través de dibujos o ejercicios lúdicos y así reducir la incertidumbre en ellos".
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Cuidar los espacios: "Es fundamental que los padres puedan tener su espacio de autocuidado frente a una situación de estrés en la que todos estamos inmersos. Respetar los tiempos de familia, pero también respetar momentos consigo mismo, donde uno necesita cierta tranquilidad por medio del ocio, del descanso".
La psicóloga aconseja que ante momentos en que alguien de la familia pueda estresarse debido a esta situación única, otorgar un espacio para poder
descansar y recuperar energías, a través de actividades personales para después retomar la rutina familiar y laboral de manera óptima.