Ada Zanusso y Cornelia Ras.
AP / Captura
Los
adultos mayores son parte del
grupo de riesgo del coronavirus y muchos infectados de más de 65 años no logran superarlo. Sin embargo, hay excepciones, como los son el caso de
Ada y Cornelia, Italia y Países Bajos respectivamente.
"
Estoy bien, estoy bien", aseguró
Ada Zanusso, quien vive en una residencia para personas mayores en Lessona, un pueblo en la región norteña del Piamonte. "Veo tele, leo los periódicos", agregó.
Al preguntarle sobre su enfermedad, Ada es modesta: "
Tuve algo de fiebre". Su doctora agregó que la mujer
estuvo en cama una semana.
"La hidratamos porque no comía y
pensábamos que no iba a sobrevivir, porque siempre estaba soñolienta y no reaccionaba", dijo Furno Marchese.
"
Un día volvió a abrir los ojos y volvió a hacer lo que hacía antes", dijo la doctora, quien recordó cuando Ada
pudo sentarse y luego logró salir de la cama.
¿Qué la ayudó a superar la enfermedad?
"Valor y fortaleza, fe", dijo Ada. Le funcionó a ella, así que aconseja a otros que se enferman a "tener valentía, tener fe".
Su médico le preguntó a la mujer qué le gustaría hacer cuando "abran las puertas".
"Me gustaría dar un hermoso paseo", respondió. ¿Y tus tres bisnietos? "Verlos jugar juntos".
Por ahora,
Ada está aislada de los otros residentes mientras espera otra prueba para confirmar que ya no da positivo al virus.
Creció en Treviso, en la región de Veneto, en el noreste del país, en donde trabajó durante muchos años en la industria textil. Ada, que
cumplirá 104 años el 16 de agosto, tuvo cuatro hijos -tres de los cuales aún viven-, cuatro nietos y tres bisnietos.
"Está mayor, pero
sana, sin enfermedades crónicas", dijo su doctora.
"No esperábamos que sobreviviera"
El caso de
Cornelia Ras es todavía más impresionante. La mujer
cayó enferma el 17 de marzo,
un día después de cumplir 107 años y tras asistir a un servicio religioso con otros residentes de su hogar de ancianos en Goeree-Overflakkee, una isla en el suroeste de Países Bajos.
Ella y otras 40 personas en el servicio fueron diagnosticadas posteriormente como portadoras del virus.
Doce personas de ese grupo han muerto desde entonces, pero sus médicos le dijeron a Cornelia el lunes que
había vencido la infección.
"No esperábamos que sobreviviera a esto", dijo su sobrina Maaike de Groot al periódico AD. "No toma medicamentos, todavía camina bien y se arrodilla todas las noches para agradecer al Señor. Por lo que parece, podrá continuar haciéndolo".
Cornelia nació cinco años antes de que apareciera la Gripe Española y un año antes de que estallara la Primera Guerra Mundial. Vivió la Segunda Guerra cuando era adulta y ahora puede sumar a su biografía el haber vencido al coronavirus.