La industria minera chilena enfrenta un presente determinante para su desarrollo en los próximos años. Esto se debe a la
discusión en el congreso de un royalty minero, que establece un impuesto por la explotación de la minería del cobre, del litio y de todas las sustancias concesibles, por parte de las empresas.
Sobre este escenario,
Sergio Hernández, director ejecutivo de la Asociación de Proveedores Industriales de la Minería, (Aprimin) analizó el futuro de la industria, como también la relevancia de las empresas proveedoras en el sector minero.
El ex subsecretario de Minería, señala que el proyecto de ley tiene
"un error conceptual muy grave". "Muchos parlamentarios que firmaron la iniciativa expresan que el royalty minero no existe. Pero sí existe, ya que hay un impuesto específico a la actividad minera".
También expresa que un royalty a las ventas mineras
"generaría una gran cantidad de problemas de compañías mineras, afectando el empleo, contratistas, comercio", ya que "estás gravando los costos, lo que es regresivo e incluso inconstitucional".
Hernández, quien fue presidente ejecutivo de la
Comisión Chilena del Cobre (Cochilco), espera que en el Senado se cambie el curso del proyecto, tras ser aprobado en la Cámara de Diputados.
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Con el royalty podemos llegar al último lugar de atractivo en cuanto a inversión minera, porque al gravar con estas altas tasas, se puede caer la cartera de 74 mil millones de dólares de inversión de Cochilco para los próximos diez años, lo que puede afectar a distintos sectores de la economía", dice.
Cabe señalar que actualmente,
la cartera de inversión en proyectos mineros 2020-2029 (de acuerdo con el catastro de Cochilco) es de US$ 74.047 millones, siendo la minería la actividad económica que más invierte en el país. Revisa la entrevista completa en EmolTV.
