La escasez hídrica es una realidad a la que se enfrenta el mundo y no es ajena a Chile. Este déficit de recursos afecta a la población, ecosistemas y también el desarrollo económico del país. En el diario vivir se pueden tomar acciones para hacer un uso más consciente del agua.
Estudios reflejan, que la actividad minera es una de las que consume menor cantidad de agua con relación al total del recurso en Chile. En ese contexto el Centro de Recursos Hídricos para la Agricultura y la Minería (CHRIAM), liderado por la Universidad de Concepción, se ha propuesto un importante compromiso con promover la investigación en este sentido.
Para conocer en detalle de qué se trata esta organización y las iniciativas que están llevando a cabo, el investigador de cabecera, Leopoldo Gutiérrez, dio a conocer en EmolTV los principales objetivos que tiene actualmente.
Gutiérrez, señala que “Yo diría que estamos en una situación compleja, la cual debemos enfrentar con más investigación y desarrollo tecnológico. Por ello, el tema de optimizar el recurso hídrico, es fundamental para las empresas mineras. En mi opinión, hace más de una década que vienen haciendo avances significativos, como la disminución en el uso unitario del agua en sus procesos”.
El investigador aclara que estos avances en la industria minera se han hecho en condiciones no tan simples, ya que los minerales como el cobre requieren más agua al ser tan complejos. A pesar de ello, él considera que la disminución del consumo hídrico en la minería se debe a la incorporación de tecnologías. También destaca las investigaciones que realiza el CHRIAM; sumado a eso, menciona que es indispensable que el personal minero esté capacitado y alineado con este objetivo de optimizar los recursos.
¿Cuáles son los compromisos del CHRIAM en cuanto a la investigación de los recursos hídricos del país? Ante el interrogante, el investigador Gutiérrez señaló que los principales objetivos del centro de estudios son: promover la investigación en temáticas de recursos hídricos para crear conocimiento y desarrollar tecnología que aporte a este concepto de seguridad hídrica, para los ecosistemas, para las comunidades y los sectores productivos.
En esa misma línea, agregó que “los objetivos del centro se logran a través de cinco líneas de investigación: la primera se relaciona con el uso eficiente del agua; el segundo con la búsqueda de nuevas fuentes de agua para agricultura, la minería y las comunidades; la tercera tienes que ver con la disponibilidad y calidad del agua, muy relevante para la agricultura y la minería frente al cambio climático. La cuarta línea es tecnología para el tratamiento de agua, y finalmente una línea que tiene que ver con gobernanza y servicios ecosistémicos y sostenibilidad”.