Peanut con su dueño, Mark Longo.
AP
Peanut, la ardilla estrella de las redes sociales que se encuentra en el centro de la atención mediática después de que
fuera confiscada a su dueño en el norte del estado de Nueva York y
sacrificada, dio negativo en la prueba de rabia, dijo un funcionario del condado.
El Departamento de Conservación Ambiental del Estado se llevó a la ardilla y a un mapache llamado Fred, el 30 de octubre de la casa y santuario de animales de Mark Longo en la zona rural de Pine City, cerca de la frontera con Pensilvania.
La agencia dijo que había recibido
quejas de que se estaba manteniendo a la fauna silvestre de forma ilegal y potencialmente insegura, pero los funcionarios han enfrentado un aluvión de críticas por la incautación. Es más, los empleados del gobierno dijeron que desde entonces han enfrentado amenazas violentas.
El DEC y los funcionarios del condado de Chemung dijeron que la ardilla y el mapache
fueron sacrificados para que pudieran ser examinados para detectar rabia, después de que Peanut mordiera a un trabajador del DEC involucrado en la investigación.
El director ejecutivo del condado de Chemung, Chris Moss, dijo que las
pruebas realizadas a los dos animales dieron negativo durante una conferencia de prensa en la que se detalló el papel del condado en el incidente. Asimismo, indicó que el condado trabajó con el Estado y siguió los protocolos.
Cabe mencionar que Peanut ganó decenas de miles de seguidores en Instagram, TikTok y otras plataformas en los más de siete años que pasaron desde que Longo lo acogió después de ver a su madre ser atropellada por un auto en la ciudad de Nueva York.
Longo dijo que estaba en proceso de presentar los trámites para obtener la certificación de Peanut como animal educativo cuando lo incautaron, ya que en Nueva York la ley prohíbe tener un animal salvaje sin licencia.
"No me sorprende demasiado, teniendo en cuenta que viví con Peanut durante siete años y medio, y con Fred durante cinco meses. No estoy echando espuma por la boca".
Mark Longo, dueño de la ardilla
En cuanto a los resultados negativos de las pruebas, el dueño de la ardilla sostuvo que no eran una sorpresa y criticó las acciones del gobierno.
"No me sorprende demasiado, teniendo en cuenta que viví con Peanut durante siete años y medio, y con Fred durante cinco meses. No estoy echando espuma por la boca", dijo. "Sabía que los resultados de la prueba iban a ser negativos", agregó.
De hecho, según consignó TMZ, las autoridades sacrificaron a la ardilla a pesar de que existían pruebas de que no tenía rabia. Es más, había mordido a Mark en varias ocasiones y él nunca mostró un síntoma de la enfermedad.
Por su parte, el DEC dijo en una declaración preparada que había una investigación interna, y que estaban revisando las políticas y procedimientos internos.