SYDNEY.- Una cuarentena de travestis, conocidos en Australia como "drag queens" y escogidos de entre 200 participantes por el Comité Organizador de los Juegos Olímpicos de Sydney (Socog), protagonizarán la ceremonia de clausura de los Juegos.
La propuesta, difundida hoy a través de la radio, ha despertado de forma inmediata las críticas de parte de la comunidad australiana, mientras que el creador de la ceremonia y autor de la idea, Ric Birch, calificó hoy esas censuras de "reaccionaras" y explicó que "las drag queens forman parte de la vida cotidiana de Sydney".
El Socog no quiso, en un primer momento, hacer comentario alguno sobre el asunto tras alegar que el contenido de la ceremonia debía ser secreto para sorprender al público.
Sin embargo, debido a las reacciones levantadas por la información, los representantes de la organización explicaron, en un breve comunicado de prensa, que sólo un fragmento de las tres horas de espectáculo incluye una referencia a la película australiana "Priscilla, reina del desierto".
Esa película, reconocida internacionalmente, trata sobre tres "drag queens" que recorren en un autobús diversos poblados del desierto australiano para mostrar su espectáculo.
"Es únicamente un elemento que homenajea a las artes y la cultura australianas, no un tributo a las drags, como otros han interpretado", indica el comunicado del Socog.
Birch, refiriéndose a "los reaccionarios de la derecha, o cualquiera que sea la parte de la comunidad que se siente escandalizada por eso", dijo que "ya se sabe que siempre se van a escandalizar".
El creador de la ceremonia añadió: "No estoy seguro de si han notado que en Sydney hay un desfile de homosexuales en Mardi Gras -una fiesta celebrada durante los carnavales, en la que todo el mundo se libera y muestra sin tapujos su tendencia sexual- con cientos de miles de espectadores y que atrae una inmensa atención internacional".