Reinaldo Navia, jugador de América de México.
SAO CAETANO DO SUL.- El club mexicano América se impuso hoy ante Sao Caetano brasileño por 2-1 y quedó como solitario líder del Grupo 1 de la Copa Libertadores de América y amplió a tres partidos su invicto en la competición.
Pavel Pardo, con un gol a los 70 minutos, y del chileno Reinaldo Navia, con otro de cabeza a tres del final, sellaron una brillante presentación ante un desconocido Sao Caetano, que apenas infundió peligro con el gol de Marcinho, a los ‘75.
América y Sao Caetano entraron hoy en la cancha del Anacleto Campanella compartiendo el liderato del Grupo 1, con 4 puntos. Con la derrota, los brasileños quedan en una situación complicada para alcanzar el liderato, que da una plaza para los octavos de final de la Copa Libertadores, ya que sólo los líderes de cada grupo avanzan automáticamente.
Para recuperar la punta, Sao Caetano debe vencer en el partido de vuelta contra América, el próximo 17, en Ciudad de México.
Los pupilos de Muricy Ramalho comenzaron hoy con muchos problemas en la marca, que el centrocampista Pavel Pardo pudo comenzar a capitalizar con un remate que pasó a milímetros del fondo de la malla de Silvio Luiz.
Cuauhtémoc Blanco y el chileno Reinaldo Navia también tuvieron el camino expedito para mover las redes, pero en los tres casos faltó puntería y sobró energía en los impactos.
Las "Aguilas" del América se pasearon por el césped como dueños de la cancha y las dificultades apenas surgieron a cuentagotas a partir del minuto 33, cuando Fabrício Carvalho estuvo a punto de marcar tras un corner.
En el segundo tiempo Sao Caetano pareció despertar y, con un planteamiento más ofensivo, logró recuperar el balón y forjar algunas maniobras en los pagos de Adolfo Ríos.
Para entonces, el centrocampista colombiano Frankie Oviedo había retrocedido para hacer sombra de marca y con ello sus compañeros Blanco y Navia quedaron a expensas de sus custodios.
El contragolpe fue el arma elegida por Leo Beenhakker para contrarrestar la euforia ofensiva de sus adversarios. Y por esa vía surgió el primer gol, marcado en doble remate de Pardo sobre Silvio Luiz tras un lanzamiento profundo de Oviedo.
La ventaja no demoró mucho porque cinco minutos después la defensa mexicana se desconcentró y Marcinho empujó con fuerza un balón que había quedado sin dueño en plena área.
El Sao Caetano se animó con el empate, pero dejó fisuras en sus líneas de contención. Un remate cruzado, sin opositor en el frente ni en el centro facilitó el salto de Navia para conectar de cabeza y anidarla en el fondo de la red.