LONDRES.- El capitán de la selección inglesa de fútbol, David Beckham, no tendrá que enfrentarse a una acción disciplinaria después de decir a un diario británico que había provocado una tarjeta amarilla durante un partido de clasificación para el Mundial.
Beckham admitió la semana pasada que había provocado que le mostraran una tarjeta amarilla con una falta intencionada al galés Ben Thatcher, el pasado 9 de octubre.
El mediocampista forzó una falta deliberada para cumplir la sanción, puesto que había visto otra tarjeta amarilla en un partido disputado contra Austria hacía cinco semanas, contra Azerbaiyán.
Beckham, que en el encuentro con Gales se había dañado la costilla antes de cometer la falta, quiso hacer coincidir el período de baja médica por lesión con la suspensión que le apartaría del partido contra Azerbaiyán.
La Asociación del Fútbol inglés dijo el jueves que no tomará medidas disciplinarias por el hecho de que Beckham haya confesado que lo hizo intencionalmente.
"Tras haber seguido el debido proceso según el reglamento disciplinario y examinar toda la información disponible, la FA ha llegado a la conclusión de que no hay pruebas suficientes que justifiquen una sanción disciplinaria", señala la FA en un comunicado.
"Sin embargo, se le ha recordado a David Beckham sus responsabilidades y las reglas de conducta que se espera de él que cumpla tanto como jugador como capitán del equipo inglés", agrega la FA, que da por concluido el asunto.