SANTIAGO.- En una infartante definición a penales, Universidad Católica se consagró como el nuevo campeón del fútbol chileno, al derrotar a Universidad de Chile por 5-4, tras perder el encuentro por dos goles a uno.
Pese a que el conjunto azul dio vuelta un resultado adverso y obligó a la definición desde los doce pasos, la UC se quedó con el torneo de Clausura 2005, completando un año espectacular.
Porque la UC llevaba 24 partidos invicto, pero le quedaba el más importante. Ese que le podía dar el título o marcar un nuevo fracaso y marcar a fuego, otra vez, el mote de "arrugones".
Y los de Pellicer comenzaron con el pie derecho porque a los 5' Osorio se mandó un
jugadón tras una recuperación de Ormeño y luego de combinar con Arrué, liquidó a Herrera con un toque sutil.
No podía haber un comienzo mejor. A la U le costaba dos goles ir a la definición a penales, pero lo peor fue que la UC no bajó su regular juego, que le quitó la pelota a la U pese al despliegue ofensivo que hizo Pinto con Salas, Rivarola y Olivera.
Si bien la UC no tuvo el 2-0 en la primera etapa, sí lo pudo marcarlo en la segunda. Quinteros y Rubio se lo perdieron en la misma jugada, Herrera les ahogó el grito con su cuerpo y la ayuda de los postes.
Pero a la jugada siguiente, Droguett llegó hasta el fondo (las imágenes de TV demostraron que la pelota salió completamente) y su centro lo empalmó de primera Salas. Gol de la U, miedos cruzados. Y 19 minutos después llegó la estocada de Rivarola. Para gritar "arrugones".
Mas la UC sacó fuerzas, emparejó el juego a puro ñeque, con despliegue de piernas y con Conca tratando de aguantar el balón para unir las líneas. Así corrieron los últimos minutos, hasta que Selman no se quiso complicar más y a los 90 decretó el fin del partido.
La definición comenzó con "triunfo" azul, pues el sorteo determinó que la tanda de penales se lanzara en el arco sur, con la barra de la U como testigo de primer orden. Pero al final celebró la UC y todos quisieron ser generales después de la batalla: "¿Quién dijo que éramos arrugones?", se escuchó repetidamente.
Con lágrimas en los ojos, Jorge Pellicer, el entrenador cruzado, dedicó el triunfo a su "familia, a los hinchas y a todo el mundo". No arrugó, pero sí se quebró.
Universidad Católica: José María Buljubasich; Albert Acevedo, Jaime Rubilar, Mauricio Zenteno, Eros Pérez; Alejandro Osorio (75', José P. Fuenzalida), Jorge Ormeño, Francisco Arrué, Darío Conca; Jorge Quinteros y Eduardo Rubio (80', Luis Quinteros). DT-Jorge Pellicer.
Universidad de Chile: Johnny Herrera; Manuel Ibarra (87', Esteban Valencia), Julio César Moreyra, Waldo Ponce, José Rojas; Christian Martínez (46', Luis P. Figueroa), Manuel Iturra, Diego Rivarola, Hugo Droguett; Juan Manuel Olivera (68', Cristián Canío) y Marcelo Salas. DT-Héctor Pinto.
Árbitro: Rubén Selman.