La U. de Conce logró lavar heridas superando a O'Higgins por 2 a 1

SANTIAGO.- El trabajado triunfo de la Universidad de Concepción por 2 a 1 ante O'Higgins en Rancagua, tuvo a un claro artífice y figura: el portero Franco Cabrera.

En el arranque, el arquero controló dos jugadas de peligro en los pies de los incisivos Lucas Ojeda y Enzo Gutiérrez.  

Cuando O'Higgins se mostraba más claro a la hora de crearse ocasiones de gol, vino la sorpresa de Felipe Muñoz, quien a los 20' anotó tras un mal despeje de Cristian Suárez, luego de un tiro libre de Francisco Arrué.

A falta de dos minutos para término de la primera etapa, vino el premio a la insistencia rancaguina en los pies de Jaime Grondona, quien en segunda instancia -tras gran achique de Cabrera-, logró enviar el balón al fondo de la red.

En los minutos finales de la etapa, ambos equipos debieron realizar cambios obligados. Diego Sepúlveda reemplazó a Pedro Muñoz en los visitantes, mientras que Felipe Rojas ingresó por Juan Luis González, quien sufrió un esguince en su tobillo izquierdo.

Cabrera: simplemente soberbio

Corrían 12' de la segunda etapa, cuando el paraguayo Otelo Ocampos aprovechó una gran habilitación de Gustavo Lorenzetti, para definir con clase ante la salida del ex U. de Conce, Federico Elduayen. Fue la estocada de los universitarios, cuando los locales habían arrancado mejor en el complemento.

Pero desde ahí aumentó el crecimiento de un O'Higgins que se vio beneficiado con el ingreso de Kevin Harbottle por Mauricio Aros. 

Los celestes se crearían al menos cinco ocasiones claras de gol, en los pies de Hardbottle (2), Grondona, Gutiérrez y Lucas Ojeda. Pero al frente, estuvo siempre un inspirado Franco Cabrera.

"Estamos contentos. Habíamos perdido un partido injusto ante San Felipe; somos un equipo joven, y esto nos hace bien para el próximo partido ante Everton", dijo la gran figura del encuentro.

Lo triste para los dirigidos de Pellicer fue el choque de Hardbottle con Diego Sepúlveda. Éste último sacó la peor parte, pues quedó inconciente por unos minutos, pero luego recobró la conciencia mientras era atendido por los médicos penquistas.

Así la U. de Conce, con oficio, logró su primer triunfo del apertura. Tres puntos en los que tuvo mucho que ver un soberbio Franco Cabrera.