Aunque no jugó bien, González dejó todo sobre la arcilla coquimbana.
ReutersSANTIAGO.- Fernando González llegó apretado de tiempo a Coquimbo y con el match de Copa Davis en segundo plano. Su prioridad por estos días fue, sin duda, ayudar de alguna forma a los damnificados por el terremoto que afectó a Chile hace una semana.
El chileno entró muy desconcentrado y eso lo aprovechó Harel Levy, que entró al Enjoy Tennis Center de Coquimbo sin nada que perder. Pero eso le duró poco. Al final, González impuso su categoría y le dio el segundo punto de la serie al equipo nacional con una victoria por parciales de 2-6, 6-3, 6-4 y 6-4.
En 26 minutos el israelí se quedó con la primera manga ante un González que sólo se mostró sólido en el primer game del partido, desde ahí se dedicó a cometer errores no forzados y a jugar sin mucha intención. El resultado de esa mala combinación fue un 6-2 en contra.
En el segundo parcial desperó González, aunque sólo a medias. Porque si bien se quedó con el set, lo hizo sin mostrar un gran nivel.
Lo mejor del juego del chileno, que fue su pilar en los dos siguientes sets, fue su servicio. El oriundo de La Reina estuvo muy sólido con su primer saque y se anotó con 11 aces.
De esa forma, al chileno le bastó con un quiebre en el tercer game del cuarto acto para quedarse con el partido y dejar en inmejorable posición al equipo capitaneado por Hans Gildemeister de cara al dobles de mañana.
Si el domingo la dupla chilena (por ahora jugarían Massú con González, pero algunas molestias de este último podrían modificar ese escenario) vence a los israelíes pasarán a cuartos de final y entre el 9 y 11 de julio enfrentarían a República Checa en territorio nacional.