TEHERAN.- La justicia iraní dijo hoy que es completamente falso que aún sentenciaba a muerte a mujeres por lapidación y ejecutaba a menores. Para ellos, dichos comentarios carecían de base y estaban destinadas a mancillar la imagen del Estado islámico.
La imputación proviene de los grupos en defensa de los derechos humanos, quienes aseguran que Irán, en los últimos meses, condenó a muerte a criminales menores de 18 años, además de aplicar lapidación a algunas mujeres acusadas de cometer adulterio, pese a promesas anteriores de poner fin a estas prácticas.
En una reunión semanal con periodistas, a la que por primera vez fueron invitados algunos medios extranjeros, el portavoz judicial Jamal Karimirad negó tajantemente las acusaciones. "En la República Islámica ya no afrontamos ni aplicamos tales veredictos", dijo.
"Desconozco cómo obtienen esa información sin fundamento y luego crean un escándalo sobre esto. El objetivo de dichas noticias es dañar la imagen de Irán", agregó Karimirad.
La Organización de Naciones Unidas (ONU), en una resolución emitida el mes pasado, condenó el historial de Irán en ejecuciones públicas, palizas, sentencias arbitrarias, tortura y discriminación contra las mujeres.
El ahorcamiento es la forma más común de ejecución en en ese país, pero algunas mujeres adúlteras han sido lapidadas hasta la muerte en el pasado.
Esa forma de castigo desató duras críticas internacionales. La pena consiste en enterrar a las víctimas hasta la cintura y después se les lanza piedras de un tamaño medio, que no son lo suficientemente grandes como para matar instantáneamente.
Medios locales citaron el mes pasado a altos funcionarios judiciales diciendo que la lapidación de una mujer por adulterio en la ciudad de Jolfa, al norte del país, fue suspendida.
Otra mujer, presuntamente de 16 años, según el testimonio de abogados y diplomáticos que dijeron que habían visto su certificado de nacimiento, fue ahorcada en agosto en el puerto de Neka -Mar Caspio- por mantener relaciones sexuales antes del matrimonio.
Las autoridades iraníes dijeron que tenía algo más de 20 años.