SYDNEY.- Un equipo de astrónomos descubrió un nuevo y gigantesco planeta de la Vía Láctea, ubicado a unos 25.000 años luz de la Tierra.
El cuerpo celeste, denominado OB-05-071, es mil veces más grande que la Tierra y se encuentra a medio camino entre este planeta y el centro de la Vía Láctea.
El astrofísico de la Universidad de Tasmania, John Dickey, quien participó en el descubrimiento, manifestó a la emisora local "ABC", que el OB-05-071 "parece un planeta extraordinariamente enorme".
El descubrimiento del planeta se logró mediante una nueva técnica que utiliza la fuerza gravitatoria de las estrellas como lentes gigantes para representar los planetas.
Dickey explicó que la búsqueda de nuevos planetas se hace a través de una especie de yuxtaposición de estrellas lejanas de nuestra galaxia con otra estrella.
Los científicos australianos que participan en el proyecto coordinado por el Instituto de Astrofísica de París, esperan que la nueva técnica contribuya a la identificación de nuevos planetas de grandes dimensiones de la galaxia.
"Hemos luchado con esta técnica para intentar abrir una puerta para detectar planetas como la Tierra y ahora tenemos más esperanzas (de hacerlo)", subrayó Dickey.
El equipo internacional de astrónomos trabaja con dos telescopios ubicados en las ciudades australianas de Hobart y Perth, y otros dos en Sudáfrica y Chile.