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Santiago: Domingo 22 de diciembre del 2024 | Actualizado 02:22
BUENOS AIRES.- Los expedientes que autorizaron el ingreso de 68 criminales de guerra nazis a Argentina luego de la Segunda Guerra Mundial fueron quemados o donados como papel usado, según una investigación de la Dirección Nacional de Migraciones divulgada hoy.
De todas formas se recuperaron las tarjetas de desembarco de los criminales nazis, entre los que se encuentran los jerarcas alemanes Josef Mengele, Adolf Eichmann y el ex capitán de las SS Erich Priebke, indicó la dependencia oficial al diario argentino Clarín.
Priebke llegó al país con un pasaporte de Letonia bajo el nombre de Otto Pappe el 14 de noviembre de 1948 en el vapor “San Giorgio,” Mengele ingresó con el nombre de Gregor Helmut el 20 de junio de 1949 en el buque “North King" y Eichmann entró con un pasaporte italiano falso a nombre de Riccardo Klement el 14 de julio de 1950 en el vapor “Giovanna C".
Mengele, quien hizo inhumanos experimentos con detenidos en el campo de concentración de Auschwitz, falleció en 1979 en Brasil, mientras que Eichmann fue condenado a la horca en Israel en 1961, y Priebke fue sentenciado a cadena perpetua en 1997 por la Justicia italiana por participar en la matanza de las Fosas Ardeatinas en 1944.
Entre los papeles que posee la Dirección argentina de Migraciones también se encuentra el expediente que impulsó el tres veces presidente Juan Domingo Perón entre 1946 y 1947 para el ingreso de 30.000 croatas, de los cuales ingresaron finalmente más de 7.000, entre ellos Ante Pavelic, líder pro-nazi de la II Guerra Mundial.
De todas formas, los expedientes que reunían información más detallada de los criminales nazis fueron quemados por “la falta de espacio", según figura en los archivos de la dependencia oficial difundidos por el periódico.
La medida involucró no sólo a los expedientes que ratificaban el ingreso de los criminales de guerra, sino también los del resto de los inmigrantes que entraron al país entre 1946 y 1952.
En 1970 el Gobierno argentino también autorizó que otros expedientes de migraciones fueran donados a una asociación de sordomudos como papel usado.
