SANÁ. - Un tribunal concedió el divorcio a una niña yemení de ocho años que había interpuesto una demanda contra su padre por haberla "obligado hace dos meses y medio a casarse" con un hombre 28 años mayor que ella.
"Me siento feliz por estar ahora divorciada. Podré ir de nuevo a la escuela", declaró sonriendo a los periodistas Nojud Mohammad Ali, quien presentó el sábado un recurso judicial contra su padre Mohammad Ali Al-Ahdal y su marido Faez Ali Thameur.
La niña de ocho años, según el presidente del tribunal, el juez Mohammad Al Qadhi, declaró estar en segundo de primaria cuando la forzaron a contraer matrimonio.
"Me pidieron que firmara el contrato de boda y quedara en casa de mi padre hasta los 18 años de edad. Pero una semana después de la firma, mi padre y mi madre me obligaron" a vivir en casa de mi marido, agregó Nojud, vestida de negro, como la mayoría de las niñas y mujeres yemeníes.
En adelante "voy a vivir en casa de mi tío materno", explicó la niña, que dice haber perdonado a su padre.
"Estaba obligado a casarla. Pero la casé con su consentimiento, ya que temía por ella y por mis hijos", gritó su padre durante la audiencia.
Para justificar la boda de su hija, Mohammad Ali Al Ahdal, un desempleado, contó a la corte que un hombre había secuestrado hace unos años a su hija mayor, con la que al final se había casado. Posteriormente este mismo hombre había secuestrado a su hija menor, casada y madre de cuatro niños, lo que le costó una pena de prisión, añadió.
"Me casé con su consentimiento y el de sus padres", alegó el marido en su defensa.
En respuesta a una pregunta del juez, dijo que "el matrimonio se había consumado" y que no golpeó a la niña.
La estructura de la sociedad en Yemen, país de la península arábiga, se rige por un sistema tribal.