MIAMI.- Un empresario venezolano admitió hoy haber pagado con su socio decenas de millones de dólares de sobornos a militares, gobernadores y funcionarios de la administración de Hugo Chávez para obtener contratos multimillonarios.
Carlos Kauffmann y Franklin Durán están acusados de asociarse para ocultar que 800.000 dólares de un maletín confiscado en Buenos Aires estaban supuestamente destinados a una campaña política argentina.
Kauffmann, quien declaró bajo juramento a pedido de la fiscalía en el juicio de su socio Durán, expresó que ambos estaban seguros de que si lograban encubrir el escándalo del maletín, "íbamos a recibir grandes contratos, grandes sumas de dinero".
De acuerdo con la Fiscalía, Kauffmann, Durán y otros tres acusados actuaron ilegalmente como agentes del gobierno venezolano para ocultar que el dinero del maletín era uno de los tantos envíos de Chávez a la campaña presidencial de la ahora Presidente Cristina Fernández.
En la séptima semana del juicio de Durán, Kauffmann, de 36 años, declaró sin la presencia del jurado. La jueza debe aún decidir si permitirá o no su testimonio ante los jurados, en la etapa final del juicio.
Al comienzo de la audiencia, el abogado defensor de Durán, Ed Shohat, le pidió a la magistrada que no permitiera el testimonio de Kauffmann, al considerar que "pondrá en riesgo el juicio". Solicitó también que fuera cerrada la sala y que la prensa no pudiera presenciar las declaraciones.
Shohat ha alegado que Durán fue inducido por el FBI y el gobierno estadounidense a involucrarse con el escándalo del maletín.
La magistrada Joan Lenard, sin embargo, desestimó su pedido.
La Fiscalía pidió que Kauffmann declarara para demostrar que la conducta delictiva de Durán, de 41 años, se remonta a años atrás. Eran socios desde hacía unos 10 años y compartía por partes iguales, el 50% cada uno, los negocios, dijo Kauffmann.
A lo largo de su testimonio, el empresario reveló que junto con Durán pagaron millones de dólares de sobornos a la Guardia Nacional de Venezuela y los ministerios de Finanzas y Educación para poder mantener los negocios que realizaban con estas instituciones.
También mantuvieron multimillonarios negocios corruptos con las gobernaciones de los estados de Cojedes y Vargas.
Kauffmann indicó que sus contactos eran funcionarios de altos cargos de esas carteras, que por lo general manejaban las finanzas, entre ellos el general Víctor José Medina, quien administraba las finanzas de la Guardia Nacional; el gobernador del estado de Cojedes, Jhonny Yánez Rangel; el gobernador del estado de Vargas, Antonio Rodríguez; y el ex ministro de finanzas Tobías Nobrega.
Para la Guardia Nacional, por ejemplo, explicó que le manejaron el dinero del presupuesto entre 1998 y 2001, colocándolo en bancos y quedándose con un 10% del dinero -la mitad para cada uno de ellos- como parte de sus honorarios.
Además dijo que pagaban sobornos a funcionarios de la guardia para mantener los contratos de ventas de objetos, que no especificó cuáles eran.
"Administrábamos su dinero", expresó el empresario, que lucía tranquilo y estaba vestido con traje marrón claro de preso.
Por otra parte, los empresarios ganaron 100 millones de dólares en una operación para reestructurar la deuda de Venezuela. En ese negocio con el Ministerio de Finanzas ganaron cerca de 100 millones de dólares y pagaron alrededor de 23,8 millones en sobornos a cuatro funcionarios de esa cartera, que Kauffmann identificó como el ministro Nobrega, el ex viceministro de Finanzas Jesús Bermúdez, el director de Crédito Público Alejandro Dopazo, y el consejero financiero Lenin Aguilera.
Durán y Kauffmann contribuyeron también con 250.000 dólares a la campaña política de Antonio Rodríguez, en Vargas, y luego se involucraron con la administración de los fondos del presupuesto de ese estado, de manera similar que como lo hicieron en Cojedes.
Además, entre 2000 y 2008 recibieron unos 30 millones de dólares por negocios de construcción con el estado de Vargas y pagaron el 10% de ese dinero en sobornos a dos funcionarios de ese estado, indicó Kauffmann.
Explicó también que junto a Durán conocieron a Yánez Rangel cuando aún estaba en campaña política y le ofrecieron su avión privado para que se trasladara de un lugar a otro. Cuando Yánez Rangel fue elegido gobernador comenzaron a administrar el dinero de Cojedes y colocaban los fondos en diferentes bancos, entre ellos Bancoro. Por esta tarea recibían como pago un 10% del dinero y luego el 35% de ese monto lo entregaban como sobornos a altos funcionarios del estado, entre ellos el gobernador.
Kauffmann, quien ya había declarado anteriormente en el juicio como testigo de la Fiscalía, se declaró culpable de las acusaciones de desempeñarse ilegalmente como agente de un gobierno extranjero y de asociarse ilícitamente para ocultar el origen y el destino del dinero del maletín. Decidió cooperar con las autoridades estadounidenses para que le reduzcan su condena, y aún espera la sentencia.
Durán, en cambio, es el único de los acusados que se declaró inocente y por eso enfrenta un juicio. Si el jurado lo considera culpable, podría ser condenado a un máximo de 15 años de prisión.