WASHINGTON.- La Corporación Federal de Seguro de Depósitos (FDIC) de Estados Unidos cerró ayer, viernes, otros siete bancos regionales, con lo que alcanzan a 50 las entidades financieras que quebraron este año.
El último banco en bancarrota es el City Bank de Lynnwood, en el estado norteamericano de Washington. Los ahorros son asumidos, como es usual, por un banco vecino, para que los clientes pueden acceder a sus fondos.
Los bancos pequeños y medianos en Estados Unidos fueron los perdedores por la crisis económica y financiera que afectó al país.
En cambio, las grandes entidades, con excepción del banco inversor Lehman Brothers y la caja de ahorros Washington Mutual, fueron respaldadas por el gobierno de Estados Unidos con fondos.
El año pasado fueron 140 los institutos financieros que quebraron como consecuencia de la crisis financiera. Si se mantiene la tendencia, esta cifra podría ser superada este año.