Nace una nueva orquesta
Gilberto Ponce 26/1/2005
Bajo el alero de la Municipalidad realizó su primera presentación la llamada "Orquesta Sinfónica del Instituto Cultural de Providencia", conjunto dirigido por Denis Kolobov, destacado violinista ruso afincado en nuestro país.
Noticia que debe llenar de alegría a los melómanos, pues significa un nuevo impulso a la cultura musical de la capital. No sabemos los propósitos de la nueva agrupación, pues en ninguna parte se han explicitado, tampoco se ha anunciado una temporada, si es que la tendrá, o bien cual repertorio abarcará, pues en el programa impreso que se repartió al público no se hace alusión a estos aspectos, aun más, ni siquiera aparecía el nombre de la orquesta.
El concierto se realizó como homenaje a instituciones relacionadas con la Embajada de Italia, que han colaborado con el Instituto Cultural, y se efectuó en el Teatro Oriente, recinto que se cubrió con cortinajes blancos que opacaron notablemente la acústica.
En el aspecto musical debemos señalar que se trata de una orquesta formada sobre la base de instrumentistas de otras orquestas capitalinas, que se destacan por su musicalidad, sonido y afinación, a su director le sobra entusiasmo y con seguridad con más tiempo en esa labor, conseguirá resultados mejores. Sus versiones aún son planas en lo dinámico y su batuta no es lo suficientemente clara como para evitar ciertos desajustes.
No obstante lo anterior, en el misceláneo programa se observaron logros importantes, como en la "Muerte del ángel" de Astor Piazzolla, para cuerdas, con Kolobov como solista y director. Secundado en gran forma por Francisco Roa el violín concertino y Claudio Morales en viola, en esta obra se logró rescatar el espíritu popular arrabalero, llevado a lo clásico. Igual cosa ocurrió con la popular "Czardas" de Vittorio Monti, sin duda de lo mejor de la noche.
La obertura de la opereta "El Murciélago" de J. Strauss, mostró al conjunto un tanto frío, pero en buen nivel de afinación. Muy interesante resultó la versión del Vals de la Suite "Mascarade" de Khachaturian, donde es evidente la mano del director violinista. Al "Intermezzo" de la ópera "Cavalleria rusticana" de Mascagni le faltó fuerza y dramatismo.
De la suite para orquesta de la ópera "Carmen" de Bizet, se escucharon 5 fragmentos que lograron el entusiasmo del público. Con relación a la "Cueca" de los "Aires Chilenos" de Enrique Soro, señalaremos que el carácter del director no es afín al folclor, por más entusiasmo que ponga.
En resumen, una buena noticia esta nueva orquesta que está dando sus primeros pasos, y que aún tiene largo camino que recorrer. Formada por muy buenos músicos y con un director con talento y musicalidad, ahora debe afianzarse en este nuevo camino, por lo que es prematuro hacer un juicio definitivo sobre su real potencialidad.