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Camino al Oscar |
El tema de su postulación a ser una de las candidatas a los premios de la Academia, ella lo tiene claro: "Tenemos que juntarnos con el ministro (de Cultura, José Weinstein) a ver si nos va a financiar o no. Ellos entregan recursos para la copia, porque debe haber una nueva con subtítulos, para que se proyecte y los miembros de la Academía vayan a verla. Eso es lo mínimo, con eso puedes postular y ser nominado, pero compites con películas que hacen eso y gastan un millón de dólares en marketing.
Todo dependerá de cuánto nos quieran apoyar, nosotros no tenemos plata para gastar en marketing. La película igual tiene una pequeña chance de ser nominada sin nada, pero es milimétrica porque lo que debes conseguir es que más miembros quieran ver la película".
Sus expectativas son altas, pero no pierde el sentido de la perspectiva: "Esta no es una película Oscar, a mí no me lo parece, sería muy extraño que fuera nominada".
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VALDIVIA.- La pantalla en un momento parece haber sufrido un serio desperfecto, porque justo cuando Cristina estaba lista para darle una lección a una madre que le está pegando a su hija, cambia completamente y se transforma en una versión a gran escala de "Street fighter", el popular video juego, y a ella la convierte en una versión de carne y hueso de uno de sus personajes.
La escena, en realidad, pertenece a la película "Play", el debut como directora de Alicia Scherson, una producción que la ha transformado en el rostro más destacado entre los realizadores que debutaron este año, como Pablo Solís, Francisca Schweitzer y Gonzalo Lira, por los premios que ha recibido en los festivales de Tribeca, Montreal y Santiago y su nominación para ser la candidata chilena a disputar un cupo entre los largometrajes que lucharan por un Oscar.
Ahora está en Valdivia, donde es parte de la competencia de largometrajes con su ópera prima, un festival que le trae buenos recuerdos porque ya estuvo aquí el año pasado para mostrar un adelanto de 20 minutos de su obra, "estábamos con poca fe, porque no nos habíamos ganado el Fondart; además, la película estaba un poco larga y no lográbamos terminar de armarla, pero vinimos y hubo una buena reacción que nos llenó de energía, terminamos la película y de ahí fue todo para arriba", recuerda.
¿Esperabas la buena recepción que ha tenido "Play"?
Uno siempre espera que le vaya lo mejor posible, pero nunca sabes lo que va a pasar y ha habido hartas películas chilenas este año. Estamos sorprendidos y contentos.
La película ya ha conseguido varios premios
Yo creo que cuando empiezas bien, las cosas se van sumando. Siempre hay un efecto en cadena en que vas de bien a mejor y venir con un premio creo que dispuso a la gente de buena manera aquí, asumieron la película con una muy buena actitud y disfrutaron, se rieron, y eso era lo que yo quería. Nunca pensé que esta era una película pesada o de cine arte, así como un ladrillo, es una película ligera, que se puede ver.
El nuevo cine chileno
Los últimos estrenos nacionales, como el tuyo, han estado marcados por historias diferentes, donde los realizadores se la están jugando por conceptos nuevos. ¿Qué te parece esta tendencia?
Eso es súper bueno, porque yo ahora me siento menos sola, a pesar de que las películas son todas distintas, ver "Se arrienda”, "La Sagrada familia", cada uno va por su lado, se arriesgó, hizo lo que quiso y eso es súper interesante, creo que es un despertar del cine chileno. Ahora sí son hartas producciones y esto no para, cada película tiene su público y la gente va a empezar a sentir esta efervescencia con respecto al nuevo cine chileno.
Ahora hay más producción, creo que están coincidiendo más películas que pueden ser llamadas 'de autor', pero también está mi "Mejor enemigo", una película bélica increíble que nunca se había visto, "Promedio Rojo", una comedia adolescente, y yo creo que la gracia es que haya esta diversidad de películas, porque lo más importante es que la gente deje de pensar que el cine chileno es una pura cosa, que se de cuenta que hay películas chilenas para todos los gustos.
¿"Play", para qué gusto es?
Esa es una buena pregunta, ayer en el cine había muchos adolescentes y eso fue una novedad, fue súper bonito ver gente tan joven. Siempre pensé que podía funcionar en ellos por un enganche con el personaje de Viviana Herrera, por el Stret Fighter, pero también había una conexión con la generación de los 30 por el personaje de Tristán.
Sus próximos pasos
¿Cuáles son tus proyectos futuros?
Estoy haciendo un corto, pagado por Sedal, con Manuela Martelli, Mane Swett y la Gloria Laso, las tres encerradas en un baño y está interesante.
¿Por fin se va a revelar el misterio de qué hacen las mujeres cuando van en grupo al baño?
Claro, ahí van a ver, hacen las cosas más absurdas, pero es el baño de un aeropuerto y cada una aporta una historia.
¿Algún largometraje?
Estoy con proyectos de guión, pero con la locura del festival no me he podido sentar a escribir, por eso tengo ganas de tomarme unas vacaciones y sentarme a escribir e iniciar de nuevo todo el proceso de postular a fondos y comenzar a filmar en un año más.
Ahora debería ser más fácil, por el éxito de "Play"
Esa es la idea, que los fondos se den más fácil, que se interesen los inversionistas privados, que no haya tanto riesgo, de todas maneras mis películas no son muy comerciales, entonces tampoco va a ser tan sencillo, pero creo que ya empiezo con un piso más alto porque me conoce la gente.
¿Estás dispuesta a tranzar y hacer tus película más comerciales?
Yo me la estoy tratando de jugar por la mía, no creo que no pueda. El proyecto del corto fue con Sedal e hice algunas concesiones, pero que las hice feliz como tener un rostro famoso de protagonista...
Mane Swett
Mane Swett, pero yo siempre había querido trabajar con ella, la miraba en a teleseries y me parecía que era una actriz subutilizada, que sólo la usaban como la rubiecita bonita y a mí parecía que su cara tenía una profundidad, una especie de drama y tristeza, con su voz grave, por eso siempre creí que podía dar mucho más de sí en cine, que su cara era para cine.
Yo no podría soportar, porque me gusta tener el control, que el productor pudiera haber decidido dónde cortaba o hecho algo en el guión, si yo puedo armar haría hasta una película de terror, pero la tengo que poder hacer yo.