HONG KONG.- Los sabores de Chile y sus mejores vinos acaparan durante esta semana los paladares más exquisitos de Hong Kong, donde una agresiva campaña de promoción comercial trata de forzar a los habitantes de Hong Kong a que se enamoren de la gastronomía del país latinoamericano.
Por primera vez, uno de los hoteles que hacen de Hong Kong el paraíso de la lujuria dedica sus menús, desde el pasado día tres, y durante 10 intensas jornadas, al "pisco sour", las empanadas de pino, el chancho en piedra o el ceviche.
Desde el lunes, sencillo, amable y habilidoso, el chef Guillermo Rodríguez, considerado el mejor cocinero de Chile, se entrega para que los salmones, las carnes y la enorme diversidad de los sabores de los que goza el país queden bien grabados en la mente de los consumidores chinos.
"En Oriente vemos un mundo de comercio, de grandes expectativas para nuestro país. En Asia, Chile se conoce muy poco, e incluso hay una confusión de fronteras, por lo que tener la oportunidad de clarificar es un privilegio", asegura el cocinero a EFE.
El chef, antiguo educador gastronómico, se ha esforzado para desplazar a la ciudad una "cocina sin complejos", acompañada de forma solemne por los vinos del país, que hacen furor en Asia.
La representación del país americano en la ex colonia británica, que hasta hace pocos días estuvo dirigida por el cónsul general Fernando Pérez Egert, y que regresó ayer a Chile tras cinco años en la ciudad, se ha volcado en ofrecer lo mejor de su gastronomía al más alto nivel.
En general, la respuesta de los consumidores hongkonguenses a la propuesta, que ha sido ideada desde el punto de vista de la estrategia de promoción exterior, y dirigida a personas con un alto nivel adquisitivo, es excelente.
El principal escenario de esta puesta de largo es el hotel Shangri-la de Hong Kong, que domina la ciudad desde una colina, que está considerado uno de los sitios más elegantes del lugar y que ha destinado un restaurante entero a esta promoción chilena, donde es prácticamente imposible encontrar mesa.
Ante todo, Rodríguez destaca que trabajar en Asia entraña un contacto con la enorme "profesionalidad" de sus cocineros, como ya ha podido comprobar también al trabajar en otros países del Lejano Oriente, como Malasia.
La utilización sin tregua de diferentes variedades de cominos, algunos de ellos perfumados, no deja de representar una conexión con estas tierras donde las especias han movido el comercio durante miles de años.
"En Chile tenemos una gastronomía incipiente, y se llevan a cabo todo tipo de actividades para que Chile tenga su propia tradición y su propia identidad gastronómica", asegura el cocinero.
En el caso de este artesano de los sabores, presidente del capítulo chileno de "Les Toques Blanches", el secreto es combinar ingredientes del pueblo, como el mote, con los pescados o las carnes más exquisitas del país.
En Hong Kong, los "moais" de la Isla de Pascua y el vino son los productos más representativos del país.
Por ello, y como en años anteriores, el pasado lunes también tuvo lugar una importante degustación de vinos, a la que asistieron las 25 principales bodegas del país.
Según explicó ante EFE la directora de ProChile en Hong Kong, Rose Marie Bedecarratz, "con este gran éxito culmina un esfuerzo público y privado para presentar una muestra de los 200 mejores vinos chilenos así como de los sabores" del país.
A partir del plan "Muestra y cata - Asia", en la degustación, a la que asistieron cientos de personas, participaron bodegas como Montes Winery, Viña Candelaria, Viña Cantaluna, Viña Segu o Viña Requingua.
Aparte de Hong Kong, esta exhibición rueda por Tokio, Seúl, Taipei y Bangkok, donde muchas de esas bodegas están deseosas de encontrar importadores sólidos.
Durante el año 2004, Chile fue el quinto exportador de vino tinto a Hong Kong, y con 3,3 millones en ventas, se ha hecho con el seis por ciento de la cuota de este mercado.
Con unas 50 marcas en el mercado local, y una fuerza creciente, ya representa una amenaza para los caldos de Francia, Australia, Reino Unido o Italia.
