De izquierda a derecha, Jaime Mulet, Eduardo Díaz, Alejandra Sepúlveda, Pedro Araya y Carlos Olivares acompañan a Adolfo Zaldívar en esta foto.
Alejandro Balart, La SegundaVALPARAÍSO.- Este mediodía los diputados de la Democracia Cristiana más cercanos a Adolfo Zaldívar -Jaime Mulet, Alejandra Sepúlveda, Pedro Araya, Eduardo Díaz y Carlos Olivares- terminaron su "pausa reflexiva" y anunciaron su renuncia indeclinable al partido.
Pese a que Sepúlveda y Araya eran partidarios de seguir en el partido, para ser parte de una lista que que compitiera con el "alvearismo" en las elecciones del 6 de abril, finalmente se sumaron a la mayoría y oficializaron su renuncia 13 días después de la expulsión de Zaldívar.
Los cinco parlamenarios se turnaron para leer una declaración pública en la sala de la comisión de Constitución de la Cámara Baja, donde afirmaron que dejan la colectividad por "consecuencia" con sus principios y valores, y en "respuesta a las amenazas, a los chantajes y a las presiones que nos hicieron para intentar silenciar nuestra permanente denuncia y oposición a prácticas y políticas publicas abusivas".
Araya señaló que al interior del partido se les ha exigido "incondicionalidad y obsecuencia" frente a decisiones que "dañan la calidad de vida de las personas, imposibilitan el emprendimiento y asfixian a los agentes económicos más pequeños", entre otras cosas.
En el documento también acusaron a la líder de la colectividad, Soledad Alvear, de haberlos "hostilizado", amparándose "en una mayoría circunstancial", y producto de su "ambición presidencial".
"Frases como las de la senadora Alvear, que se avergonzaba de nosotros por nuestro voto en el Transantiago, que no merecemos estar en el partido, que nos quitarán los cupos parlamentarios, han sido pálidas muestras de lo que ha pasado en espacios más privados. Estas actitudes nos obligan", declararon.
Los parlamentarios explicaron además que su renuncia es una forma de protesta contra "todos los actos de corrupción y corrosión política que han sido desatendidos por la actual Directiva de la Democracia Cristiana", mencionando como ejemplo el Transantiago, el escándalo de la Empresa de Ferrocarriles del Estado, los PGE en la V región, el apoyo explícito a ex autoridades formalizadas por la justicia y las defensas corporativas ante los Tribunales.
Pese a que no quisieron responder si se sumarán al nuevo referente anunciado por Zaldívar y sólo señalaron que iniciarán "un nuevo camino, un camino cuyo horizonte sea un país más justo", sí anunciaron que crearán una bancada independiente junto a los ex PPD Álvaro Escobar y Esteban Valenzuela.
De esta manera, la correlación de fuerzas en la Cámara cambió radicalmente, ya que la mayoría concertacionista bajó de 61 a 56 escaños, la Alianza quedó con 55, mientras que los independientes alcanzan siete votos, los que se tornarían clave en futuras votaciones.