SANTIAGO.- Tras la toma de la empresa salmonera Aguas Claras que derivó en incidentes y enfrentamientos con Carabineros en Calbuco, el presidente de la Central Unitaria de Trabajadores (CUT), Arturo Martínez, aseguró que conflictos como el del miércoles se repetirán este año mientras el movimiento laboral no sea "escuchado" por las autoridades.
"Este tema de los salmoneros lo anuncié los primeros días de enero que venía, y nadie asumió ni creyó, y vienen otros conflictos más que van a lamentar", advirtió el dirigente en entrevista con Radio Agricultura, agregando que este jueves viajará a Puerto Montt y posteriormente a Chiloé, para ver "otros temas salmoneros que hay por allá".
La toma de Aguas Claras desató la preocupación del sector salmonero y del empresariado en general, que ve estos actos violentistas como una amenaza para su producción y ha pedido constantemente al Gobierno que haga respetar la ley y el Estado de derecho.
Sin embargo, Martínez aseveró que el movimiento sindical buscará "salirse de la ley" con el objetivo de acaparar la atención de las autoridades y hacer que se generen las condiciones para mejorar el presente de los trabajadores.
"Cuando hay una ley tan restringida que tiene un marco que asfixia a los trabajadores, que los hace negociar por empresa, indudablemente que necesitamos salir de la ley, y la única forma que la gente sea escuchada es salirse del marco legal. Yo le he dicho al presidente de los empresarios (Alfredo Ovalle): 'si ustedes no discuten el tema de la negociación supraempresas este año vamos a tener muchos conflictos laborales violentos'", aseguró.
"El delito también lo cometen los que atropellan los derechos, entonces hay dos límites para todos los lados. Lo hemos dicho y he sido muy claro: este año el movimiento sindical se va a salir de la ley, lo estoy anticipando, y el que no quiera escuchar también es responsable", recalcó a continuación el líder sindical.
Martínez aseveró que "es legítimo que los dirigentes que tienen alguna experiencia vayan traspasándola a otros sectores. Eso es legítimo y necesario, y vamos a seguir en el mismo camino. Estamos aburridos de conversar con el Gobierno, los empresarios, el Parlamento, y nadie escucha. Entonces por qué ahora se lamentan tanto".