Con el Presidente Alan García, entre otras autoridades, se reunió Piñera en Perú.
El MercurioSANTIAGO.- El presidenciable de Renovación Nacional y empresario, Sebastián Piñera, calificó de "majadería" las críticas del oficialismo por un supuesto conflicto de intereses en su reciente visita a Perú, argumentando que ésta no tuvo fines comerciales, sino que buscaba fomentar la relación social, política y cultural entre ambos países.
Fue el vocero de Gobierno, Francisco Vidal, quien a comienzos de semana estimó que el viaje se producía en un momento complejo, por lo que solicitó la "máxima prudencia" del caso. Piñera a su vez recordó que su periplo por Perú fue coordinado con la Cancillería en una reunión sostenida con el ministro de Relaciones Exteriores, Alejandro Foxley, por lo que pidió al portavoz de La Moneda "informarse mejor".
Sin ánimos de apaciguar las declaraciones cruzadas con Vidal, Piñera dijo no sentirse ofendido por el apelativo de "ciudadano" esgrimido por el ministro para referirse a él. "Si cree que me ofende, todo lo contrario (...) comparto ese título con 16 millones de chilenos", comentó.
El empresario fue enfático en recalcar que su viaje fue en calidad de dirigente político y que no habló de negocios. En este sentido, dijo que su encuentro con la ministra de Transporte de Perú no fue intencional y él no hizo más que señalar "que trasmitiría sus inquietudes a la gente de LAN", al ser requerida una colaboración en una eventual escuela de pilotos en el país vecino.
En cuanto a la demanda por límites marítimos presentada ante el tribunal de La Haya por Perú, el presidenciable de RN dijo que compartía absolutamente la posición chilena.
"Sería un error congelar toda la agenda del futuro por un problema del pasado", argumentó Piñera, recordando que temas como la integración económica, cultural y energética entre los países aún están pendientes.