Cristian Cuevas: Huelga de hambre puede preceder a nuevas movilizaciones

SANTIAGO.- El presidente de la Confederación de Trabajadores del Cobre (CTC), Cristián Cuevas, quien desde ayer mantiene una huelga de hambre en protesta por "la resistencia de Codelco a cumplir el acuerdo político" que puso fin a la reciente movilización, advierte que la medida puede ser el anticipo de una nueva manifestación masiva de trabajadores subcontratistas.

"La huelga de hambre es indefinida, se van a sumar otros dirigentes en ayuno solidario, pero es una huelga movilizadora, convocante, de advertencia, y si no se cumplen los acuerdos políticos, a la calle todos los trabajadores", afirma a Emol el dirigente, quien señala que tienen la "fuerza y garra" para movilizarse cuando quieran, a pesar de "toda la represión".

"Acá hay millones de trabajadores solidarizando con nosotros y cualquier cosa que nos pase es responsabilidad de Codelco", sostiene Cuevas, recalcando que la huelga de hambre no tiene "nada que ver" con la resolución de la Corte Suprema que indica que la estatal no está obligada a internalizar a trabajadores subcontratistas, como lo solicitaba la Dirección del Trabajo.

Argumenta que "incluso dentro del acuerdo político se incluye el tema de la judicialización, igual se tiene que revisar su aplicación en el área de los trabajadores contratistas, por lo tanto no es una amenaza para nosotros". Enfatiza que "esta huelga obedece específicamente a la persecución (a los trabajadores) y a la resistencia de Codelco a cumplir el acuerdo político".

Acusa "persecución" de Codelco a los subcontratistas

Explica que "este acuerdo político, desde el punto de vista de la realidad concreta de los trabajadores, no se ha cumplido, porque Codelco se resiste al cumplimiento de este mandato presidencial y ha hecho todo lo contrario, primero incomodando la forma de pago de un bono" de $500 mil, que debe contar con un anticipo de $300 mil líquidos el 15 de mayo a todos los trabajadores contratistas.

Junto a esto, acusa una "represión" hacia ellos luego de finalizada la huelga. "Hay un cierto estado policial, dentro y fuera, también con los guardias propios que tiene la empresa, revisando (a los trabajadores), hay una segregación hacia los contratistas todos los días y a cada hora por parte de Codelco, no se han pacificado los ánimos, ni siquiera hay intención de poder dialogar", sostiene.

"Acá han pasado siete días de maltrato, de persecución, en que se siguen caducando contratos de empresas contratistas, pero las empresas contratistas están calladitas porque les están compensando esos contratos y la finalidad última es desarticular el movimiento sindical", acusa el presidente de la CTC.

Ante esta situación, indica que lo que solicitan es que los garantes del acuerdo político aseguren la convocatoria de las partes para revisar el cumplimiento del pacto suscrito en agosto de 2007 pues, por el contrario, "lo único que se genera es incertidumbre y un ambiente en que Codelco opere para desconocer el acuerdo".