SANTIAGO.- Molesto y con una sensación de que en Chile hay "impunidad", el fotógrafo de la agencia de noticias EFE reaccionó ante la condenada dictada esta semana por el juzgado militar que condenó a su agresor, el cabo segundo Iván Barría, a 541 días de cárcel remitidos por la agresión que le provocó al profesional de la prensa una grave lesión ocular.
El 21 de mayo de 2009 en el marco de una protesta en la ciudad de Valparaíso, Salas se encontraba cubriendo los incidentes cuando el uniformado, que pertenecía a la policía montada, lo golpeó en su ojo derecho con una fusta de metal. Tras un proceso en la justicia castrense se determinó que el carabinero no cumplirá pena efectiva por esta lesión.
En conversación con Radio Cooperativa el reportero gráfico de agencia EFE dijo que "no encuentro que la justicia sea igual para todos porque me parece irrisorio una condena que en el fondo el caballero tiene una pena remitida y nunca va a estar en la cárcel ni un solo día".
Junto con ello la víctima de la agresión agregó que a su juicio "el sistema legislativo le garantiza hoy día a un carabinero la impunidad" y calificó como "una burla" la condena dictaminada por el juez militar sobre todo por la intención que tuvo el uniformado y las consecuencias que le trajo el golpe en su ojo.
"El daño en la retina es perpetuo, irreparable" y detalló a la radioemisora que ese ojo "sólo percibe luces y formas, un porcentaje que a mí no me sirve para nada", teniendo en cuenta que se desempeña como fotógrafo.
Finalmente expresó que la sentencia "me impide ir a trabajar mañana, porque si viene otro carabinero y me pega en el otro ojo y quedo totalmente ciego, va a ser imposible que le tome fotografías cuando huya". Esto pues tras el incidente Salas corrió tras su agresor para fotografiarlo, situación que permitió identificar al victimario.