El abogado Michel Galasso. (Foto: Pablo Mardones) |
| "Es el caso mediático más complicado que he debido resolver" |
Tras haber sido designado por turno por el ministro en visita Hernán González para investigar los supuestos delitos por abusos deshonestos cometidos al interior de la ex Colonia Dignidad, el abogado en lo criminal Michel Galasso aseguró que "es el caso mediático más complicado que me ha tocado resolver, pero desde el punto de vista de la controversia jurídica no".
De esta manera, el profesional de 30 años, casado y con un hijo, manifestó que esta designación "la tomo con mucha responsabilidad, principalmente por el impacto social que tiene este caso en la opinión pública".
En ese sentido, dijo, "ese antecedente me hace esforzarme al máximo para poder defender al señor Shaefer en una forma adecuada".
Al respecto agregó que, según la premisa de que toda persona es inocente hasta que no se demuestre lo contrario, "no puedo yo pensar que el señor Shaefer es culpable hasta que no haya una sentencia que lo determine". |
SANTIAGO.- Sin querer adelantar los detalles de lo que será la estrategia de defensa del ex líder de Colonia Dignidad, Paul Schaefer, en los casos de abusos deshonestos cometidos al interior del enclave germano, el abogado del alemán, Michel Galasso, afirmó que sólo falta que "mi cliente la apruebe".
"La estrategia está medianamente definida cuál va a ser y debe ser definida por el cliente, por lo cual me tengo que reservar, por ahora, dar a conocer cualquier tipo de lineamiento a la prensa, pero ya estamos trabajando en cuál va a ser su defensa", explicó el jurista.
Según adelantó a Emol, el lunes se reunirá con Schaefer para determinar los pasos a seguir, "para complementar o adecuar la defensa". De esta manera -dijo-
sólo cuando se reúna con su defendido se podrá tomar una decisión respecto a cuál va a ser el argumento de ésta, "si se va a alegar la inocencia o se va a apelar a razones de salud o vamos a tratar de acreditar los atenuantes para poder rebajar la pena, pero eso son cosas que debo conversar con el señor Schaefer", puntualizó.
Galasso sostuvo que hasta hoy "no me he reunido con el señor Schaefer" ni se ha comunicado por teléfono con él. "Viajo a Santiago el lunes para reunirme con Paul Schaefer (...) Él no se ha comunicado tampoco conmigo, y personas cercanas tampoco. La verdad es que la defensa la estamos realizando un poco a ciegas", dijo.
Agregó que si bien Schaefer habla español "estamos contactándonos con una persona para que nos sirva de intérprete".
Según explicó el profesional, Schaefer podría arriesgar penas de hasta 5 años de presidio, pero en el caso que existan agravantes "podría subir hasta tres grados más, dependiendo del agravante y atenuantes que concurran".
Supuestos protectores de Schaefer
Según la policía chilena, los ocho años en que Schaefer estuvo prófugo fue gracias a un selecto grupo de discípulos, colonos sindicados como los más estrechos colaboradores del ex líder alemán.
Entre ellos: Peter Schmidt, Matthias Gerlach, Renate Freitag, Maria Margarethe Strebe, Rebeca del Carmen Schaefer, entre otros.
A estas suposiciones, el abogado Galasso sostuvo que "al menos a mí ningún grupo de poder me ha contactado para poder ejercer las presiones, así que me da la impresión que estos grupos no existen".
Prescripción de los delitos
Según explicó el profesional, la prescripción de los supuestos delitos de muchos de los abusos deshonestos cometidos al interior de Colonia Dignidad "es un tema que estamos estudiando, pero actualmente, (en cuanto a) los delitos que a mí me tocan, algunos podrían estar prescritos, pero los otros evidentemente se interrumpieron a mediado de la década de los 90".
Dichas causas no estarían prescritas, sino sólo interrumpidas, "es decir existiría un proceso pendiente" contra el ex jerarca alemán.
El sábado 12 de marzo, el ministro en visita Hernán González sometió a proceso a Schaefer como autor de 26 abusos deshonestos contra menores.
Impacto mediático en la defensa
Galasso aseguró que el impacto mediático de la detención del ex jerarca alemán y el manto de cuestionamientos que pesan en su contra es algo que "dificulta un poco" el trabajo de la defensa.
En ese sentido -explicó- "la gente ya cree que es culpable de los casos (de abusos deshonestos) y eso es evidentemente una complicación desde el punto de vista social y para la defensa".
