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Santiago: Jueves 26 de diciembre del 2024 | Actualizado 09:52
SANTIAGO.- "Preocúpate de lo que viene más adelante, no de la curva", me grita Paul, mi co-piloto y corredor de fórmula GT con peinado a lo "Beckham", mientras el Porsche 911 Turbo que conduzco se aproxima a la curva a 160 kms por hora. Mis sentidos me empujan a frenar, pero Paul me indica lo contrario. Definitivamente uno no está preparado para manejar estos autos.
Paul es parte del equipo de conductores profesionales del Porsche World RoadShow Santiago, evento organizado por Ditec Automóviles, y que tiene como fin dar a conocer los distintos modelos de la marca alemana a potenciales clientes.
El evento se divide en distintas disciplinas. Primero, se hace un "check in" donde cada invitado debe firmar un documento de responsabilidades tanto para Porsche como para el conductor. Luego se recibe una tarjeta-prendedor donde están anotadas las distintas etapas y pruebas que se realizarán en el autódromo de Vitacura y por las calles de la ciudad.
Pruebas de velocidad y destreza de conducción
La primera prueba se llama "handling" (manejo, en español). En esta etapa se conducen tres autos: un 911 Carrera 4S, un 911 Turbo (modelo 997) y un Cayenne S. Tres joyas insignes de la marca alemana.
La teoría y práctica van de la mano. El curso de manejo se inicia con una breve descripción de cómo hay que sentarse en estos autos: "La pierna, con el freno a fondo, debe tener un pequeño doblé. Enseguida, con la espalda firme al asiento, estire los brazos sobre el volante y vea que sus muñecas puedan doblarse hacia arriba y hacia a bajo", dice Paul, el experimentado piloto español.
El 997 Turbo es lejos el más impactante. Con un motor twin turbo de 3,8 litros, es uno de los autos deportivos de calle más potentes del mundo. Al pisar el acelerador a fondo inmediatamente se siente cómo la "fuerza g" succiona el cuerpo al asiento. La velocidad que alcanza en la recta es difícil de igualar, pero lo que más impacta son los 3,5 segundos que demora en llegar a 100 km por hora.
La segunda etapa de manejo se llama "road tour". La prueba consiste en conducir los modelos Boxster, Panamera Turbo, Cayenne y 911 Targa por las calles de Piedra Roja, en Chicureo. El que más sorprende es el Panamera Turbo. Es un sedán grande y majestuoso, con pinta de ser muy pesado, pero está lejos de esa imagen. Es ágil, picador, liviano y de muy fácil manejo en curvas y rectas.
Posteriormente, los invitados deben cumplir con el "Off Road" o curso fuera de pista. Aquí los modelos 4x4 Cayenne son los elegidos para subir un cerro de tierra con una inclinación de 70 grados. El auto se porta de maravilla mostrando no sólo que es una belleza estética como todo terreno, sino que también es digno para ensuciarse las ruedas.
Finalmente se realiza una prueba contra reloj llamado "hot laps". En esta oportunidad, el auto designado para hacer el recorrido es el recién estrenado Boxster Spyder. Aquí el conductor es puesto a prueba contra reloj. Los tiempos van mejorando en la medida que el instructor ayuda dando tips de conducción, como no pensar en la curva, sino en "lo que viene más adelante".
