WASHINGTON.- Una nave espacial no tripulada de la Fuerza Aérea de Estados Unidos, cuya misión no es totalmente clara, aterrizó hoy en California tras una misión de siete meses.
El X-37B, la primera nave espacial de la Fuerza Aérea con capacidad de regreso, aterrizó en la Base Vendenberg.
La nave espacial "condujo experimentos en órbita por más de 220 días durante su viaje inaugural", señaló un comunicado de la Fuerza Aérea.
La nota también especificó que la nave "encendió su motor de maniobras en una órbita terrestre baja para desarrollar una entrada autónoma antes de aterrizar".
La nave robótica, de 8,9 metros de largo y alas de 4,5 metros de extensión, similar a un transbordador espacial en miniatura, requirió tres años de desarrollo y las fuerzas armadas sólo han dado vagas explicaciones sobre su objetivo o su papel en el arsenal militar norteamericano.
Las autoridades han dicho que el vehículo está diseñado para "brindar un ambiente de ensayos de 'laboratorio en órbita' para probar nuevas tecnologías y componentes".
Analistas de la industria han especulado con que el Pentágono debe tener en mente capacidades militares para la nave no tripulada o de otro modo no hubiera invertido tanto tiempo y dinero en el esfuerzo.