El París Saint Germain recibió al Bayern Múnich, en el Parque de Los Príncipes, por la ida de los octavos de final de la Champions League. Los alemanes, como era de esperarse, fueron un duro rival y se quedaron con el triunfo por 1-0.
El único gol del encuentro fue obra del francés Kingsley Coman.
El primer tiempo del partido fue un monólogo, sin emociones. Desde el primer minuto, el Bayern tuvo la posesión del balón, ante un PSG que esperó pacientemente la oportunidad de salir de contragolpe.
La visita no pudo romper el cerrojo defensivo propuesto por su rival, y el local tampoco logró salir en velocidad exitosamente. Después de 45 minutos de poca acción, los equipos se fueron al descanso 0-0.
Corrían los primeros minutos de la segunda etapa y Alphonso Davies, que había entrado recientemente por Joao Cancelo, le dio la razón a su entrenador. Subió por la izquierda y le sirvió un centro espectacular a Kingsley Coman, quien apareció solo por la derecha para conectar el balón de volea y abrir el marcador (53'). Gianluigi Donnarumma pudo haber hecho algo más para contener un tiro que pasó por debajo de sus manos.
De ahí en adelante, los bávaros fueron dominadores absolutos de la pelota, haciendo que el arquero italiano sacara lo mejor de su repertorio, en una ocasión ayudado por el palo, con tal de mantener a su equipo con vida. Ante tal situación, Christophe Galtier hizo entrar al lesionado Kylian Mbappé.
Con el ingreso de la joven estrella francesa el partido cambió. A partir del minuto 75 el PSG se hizo de la pelota y de las acciones más claras. En el 82', tras un gran centro de Nuno Mendes, fue el propio Mbappé quien emparejó las acciones, pero el VAR anuló el gol por offside del lateral portugués.
Hacia el final, Mendes, que fue uno de los mejores del conjunto local, volvió a aparecer por la izquierda y tiró un centro raso. La pelota la recibió Lionel Messi, que disparó de zurda y se encaminaba a celebrar, pero Benjamin Pavard se cruzó de urgencia para salvar a su equipo y ahogar el grito de gol del argentino.
Los parisinos siguieron intentando, pero sin éxito. El partido terminó a favor de los dirigidos por Julian Nagelsmann, quienes quedaron con la primera opción para llevarse la llave, que se definirá el próximo 8 de marzo en la cancha del Bayern.
Esta se transformó en la tercera derrota consecutiva del equipo parisino, considerando todas las competencias. De quedar eliminados ante el equipo alemán, el millonario proyecto volvería a quedar en la cuerda floja, en semanas donde el clima al interior del camarín no es el mejor.
Mira el gol de Kingsley Coman: