SANTIAGO.- El Segundo Juzgado de Policía Local de Puente Alto condenó a la concesionaria Bruno Fritsch al pago de una indemnización de $2 millones a un consumidor, además de una multa de 40 UTM (cerca de $1 millón 750 mil), tras vender un auto nuevo con reparaciones previas sin haber informado de ello al consumidor. El vehículo además presentó fallas en el aire acondicionado a sólo unos días de su entrega.
En agosto del año 2013, un consumidor de Puente Alto adquirió en dicha concesionaria ubicada en el Mall Plaza Vespucio un auto nuevo, pero a los pocos días de haber recibido el vehículo, éste presentó problemas en el funcionamiento del aire acondicionado.
Al llevar el auto al taller para su reparación, uno de los dependientes le indicó que el vehículo vendido como nuevo ya había sido reparado por una abolladura en la puerta trasera.
“A esto se sumó que al momento de realizar la transacción, la empresa actuó negligentemente y en la factura individualizó mal el número del chassis, lo que demoró la entrega del padrón, viéndose el consumidor impedido de usar el vehículo en el tiempo que lo requería”, indicó el Sernac.
Ante esta serie de inconvenientes, el comprador interpuso un reclamo en el SERNAC, pero el organismo, al no encontrar una propuesta de solución que lo beneficiara durante el proceso de mediación, denunció el hecho en el Segundo Juzgado de Policía Local de Puente Alto, instancia en la que el consumidor se hizo parte.
Durante el juicio, la empresa Bruno Fritsch rechazó las acusaciones, explicando que previo a la venta, la supuesta reparación no fue más que una ínfima desabolladura en frío que se le efectuó al vehículo. Respecto de la inscripción, ésta fue realizada adecuadamente.
Tras analizar los antecedentes del caso, el tribunal le dio la razón al Sernac y al afectado, determinando que la concesionaria infringió la Ley del Consumidor al prestar un servicio de mala calidad y con falta de información.
Por esta razón el Tribunal condenó a la empresa a pagar una indemnización de 2 millones de pesos para el consumidor tras el daño moral provocado, esto es, la tensión del hecho, las molestias y el tiempo perdido al tener que recurrir a la Justicia en busca de una solución. Asimismo, la concesionaria debió cancelar una multa de 40 U.T.M. (cerca $1 millón 750 mil).
El Director Nacional del Sernac, Ernesto Muñoz explicó que este fallo confirma que los consumidores tienen derecho a recibir información veraz y oportuna respecto de los productos que adquieren y que éstos sean de calidad.
“Los consumidores que prefieren comprar un vehículo nuevo en una concesionaria, depositan su confianza en que la empresa responderá en forma profesional por su trabajo”, agregó Muñoz.