PARÍS.- El ministro francés de Finanzas, Michel Sapin, afirmó este miércoles que Francia intentará evitar la salida de Grecia de la zona euro incluso en el caso de que el referéndum convocado en este país se celebrara y ganara el no a la propuesta de rescate.
Sapin, en una entrevista a la emisora de radio francesa "RTL", insistió en que ahora "el objetivo es encontrar un acuerdo antes del referéndum si es posible", pero no para impedir que la votación se celebre, puesto que eso es una decisión de los griegos.
"El papel de Francia es, hasta el último momento, ver si es posible un acuerdo (...) para una Grecia que recupere la estabilidad y Europa la tranquilidad", señaló el ministro, que a continuación admitió que lograrlo "es horriblemente complicado".
Interrogado sobre si él está a favor del sí en el referéndum, Sapin se resistió a contestar directamente para evitar una intromisión en una cuestión que corresponde decidir a los griegos.
No obstante, consideró que "las consecuencias" no serían las mismas: "con el sí, las negociaciones continuarían (...). Con el no, hay un riesgo de un desliz hacia la salida de Grecia del euro".
Pero a continuación, añadió que "aunque el no ganara, el papel de Francia sería intentar conseguir que Grecia se mantenga en el euro".
A la cuestión de la presunta intransigencia de Berlín con la posición de Atenas, el responsable francés de Finanzas contestó que "los más duros no son los alemanes, sino los pequeños países que han hecho esfuerzos considerables", que tienen ahora una situación "mejor" y consideran que Grecia no puede evitar pasar por el mismo proceso.
Citó los casos de Croacia y Eslovaquia y comentó que ante la crisis griega "Alemania está en una situación comprensible también respecto a la opinión pública alemana".
En cuanto a la suspensión de pagos de Grecia constatada anoche por el Fondo Monetario Internacional (FMI), el ministro aseguró que "no tiene grandes consecuencias inmediatas", pero podría tenerlas en el futuro porque de mantenerse impediría que Atenas reciba dinero de ese organismo.
En cuanto al reembolso que Grecia tenía que hacer al Banco Central Europeo (BCE) el próximo día 20, Sapin estimó que si no se hiciera "puede ser extremadamente grave" aunque dio a entender que si hubiera un acuerdo la fecha concreta no sería trascendental.