Mustafa Akinci, Jean-Claude Juncker y Nikos Anastasiades, se estrechan la mano en la zona neutral controlada por la ONU en Nicosia.
EFENICOSIA.- El presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, alabó este jueves la recuperación económica de Chipre dos años después de la crisis, viendo en ella el efecto positivo de las "difíciles elecciones" asumidas por el país.
"Chipre estuvo en una posición económica difícil en 2013, pero el Chipre que yo he visitado hoy es muy diferente", declaró Juncker después de reunirse con el presidente chipriota, Nicos Anastasiades, en su primera visita oficial a la isla.
"La economía comienza a crecer, el sector financiero se ha estabilizado y ustedes vuelven a estar preparados para aprovechar las oportunidades que les reserva el futuro", añadió, dirigiéndose a los chipriotas.
Chipre, al borde de la suspensión de pagos, debió acudir a la "troika" -formada por la Comisión Europea, el BCE y el FMI- en marzo de 2013 en busca de préstamos para rescatar su economía y obtuvo 10.000 millones de euros a cambio de una serie de severas medidas de austeridad y una reestructuración del sistema bancario, que estaba sumamente expuesto a la deuda griega.
En una aparente alusión a la situación actual de Grecia, Juncker dijo que Chipre era el ejemplo a seguir. "Las decisiones difíciles y el compromiso han dado resultados en Chipre, igual que en Irlanda, Portugal y España. Espero que otros se inspiren de ellos", lanzó el presidente de la Comisión.
Su visita a Nicosia guarda relación asimismo con las negociaciones de paz en la isla, dividida desde 1974.
"Es una oportunidad única y no debemos dejar pasar este momento", señaló, aludiendo a las conversaciones entre Anastasiades y Mustafá Akinci, dirigente del norte de la isla, invadida por Turquía en 1974 y reconocida únicamente por Estambul.
Los dirigentes chipriotas griego y turco anunciaron la semana pasada que toda solución que permita la reunificación de la isla se fundará sobre los principios de la Unión Europea.