SANTIAGO.- En cuatro años, Chile habría pasado de ser uno de los países con menores niveles de venta de cigarrillos ilegales -entendido como porcentaje de venta en unidades sobre el mercado total- del Cono Sur a encabezar esta lista. Esto, luego que la comercialización ilícita de estos productos superara el 10% de la venta total a nivel país el año pasado.
Así lo expuso Francisco Ulloa, gerente de integridad de mercado de British American Tobacco (BAT) ante la comisión de Seguridad y Antidelincuencia de la Cámara Nacional de Comercio (CNC) la semana pasada.
Según manifestó, si en 2012 el negocio ilícito alcanzaba el 3,6% del total de las ventas, en 2014 este ítem habría subido a 10,6%, equivalente a 1,4 billones de cigarrillos, consignó hoy
"El Mercurio".Para este año la compañía proyecta un 12%. Esta mayor proporción coincidió con la mayor diferencia de precio entre la cajetilla legal más barata y una de contrabando. Si en 2012 la brecha era $300, en 2015 se elevó $1.300.
El impacto que tiene el comercio clandestino de cigarrillos es alto: Mientras que en 2014 el fisco habría dejado de recaudar unos US$ 190 millones por este concepto, la firma estima que esta cifra llegaría a US$ 245 millones en 2015. El cálculo se hizo considerando el precio de la cajetilla de 20 cigarrillos más baratas en el mercado formal.
Ulloa indicó en su exposición que el "comercio ilícito es un crimen organizado transnacional muy atractivo por su bajo riesgo y alto retorno", y advirtió que la actual situación -de mayores precios formales por una mayor carga tributaria- ha empujado a muchos comerciantes a pasar a la ilegalidad. Hoy, el 70% del volumen del negocio ilícito se distribuye en puntos establecidos.
En BAT agregan que "una cajetilla genérica (como la propuesta en la normativa que se tramita en el Congreso) haría muy complejo la identificación a los entes fiscalizadores, facilitando aún más el contrabando y falsificación de cigarrillos".
Hasta 2012 las cifras de contrabando se mantuvieron siempre por debajo del 4%., destacó Ulloa. Puntualizó que cuando este ítem superó el 10%, en 2014 8,9 puntos porcentuales correspondían a contrabando y 1,7 puntos a productos falsificados. A la fecha se han incautado 66,5 millones de cigarrillos, un 15% por sobre el 2014.