Esta semana Rincón y Agnic (derecha) protagonizaron una pugna por la fusión de la AFP Cuprum.
El Mercurio
SANTIAGO.- La ministra del Trabajo y Previsión Social, Ximena Rincón, defendió este viernes sus públicas discrepancias con la superintendenta de Pensiones, Tamara Agnic, por la aprobación dada a la fusión de las AFP Cuprum y Argentum.
"Es mi obligación constitucional y legal velar por el cumplimiento de la normativa en el ámbito del Ministerio del Trabajo y sus organismos relacionados", dijo Rincón.
Al respecto, apuntó que "yo tengo opinión respecto de lo que ocurrió. Como ministra de Estado la he hecho presente a la superintendenta".
En un oficio enviado el pasado 31 de julio, Rincón expuso a la titular del regulador que del análisis queda de manifiesto que el proceso de constitución de AFP Argentum como la fusión con la AFP Cuprum, extinta según el propio informe de la SP, "es al menos irregular, no ajustándose esa superintendencia a los imperativos legales sobre la materia".
"Y, en especial, -prosigue el oficio- a su obligación de velar por los intereses de los afiliados al sistema de pensiones, al permitir operaciones comerciales de las administradoras de fondos de pensiones para fines particulares de ésta que no benefician a aquellos".
Por esa razón, solicitó directamente a Agnic "se abstenga de autorizar operaciones de la misma índole" en el futuro.
Según la titular del Trabajo, "lo importante es que las normas se cumplan, que entendamos que tenemos que dar certezas, que tenemos que proteger a nuestros trabajadores, que tenemos que proteger el sistema y frente a una situación que a mí me ha parecido irregular, después de revisarla con mis asesores y los equipos técnicos, y frente a la insuficiencia de la explicación de la superintendenta, lo he hecho presente", enfatizó.
Pese a ello, Rincón se negó a "discutir por los medios" si pedirá la renuncia a la superintendenta.