BEIJING.- Las autoridades económicas chinas defendieron hoy la veracidad de los indicadores de crecimiento nacional, asegurando que las dudas sobre ellos son "infundadas" y proceden de análisis "pesimistas".
En un comunicado, la Comisión Nacional de Reforma y Desarrollo, órgano de planificación económica del país, aseguró que esas dudas se repiten desde hace más de 30 años, "pero son voces que han demostrado no tener fundamento".
Con esta defensa de sus indicadores, Beijing quiere salir al paso de las opiniones en medios internacionales que aseguran que la expansión de un 7 % en lo que va de año, según el Gobierno chino, es en realidad uno o dos puntos porcentuales menor y ha sido "inflado" por el régimen para ocultar una crisis.
Según la comisión, las estadísticas están en línea con los estudios de investigación tanto nacionales, como internacionales, y en ese sentido citó indicadores similares ofrecidos por la estatal Academia China de Ciencias Sociales y por el Banco Mundial.
El comunicado añadió que las previsiones que desde el exterior consideran el crecimiento chino mucho más bajo se basan en indicadores "débiles" como el consumo energético o el transporte ferroviario.
Esas cifras no reflejan el desarrollo del sector servicios -representativo de un 49% de su economía-, que consume menos energía y requiere menos productos transportados, explicó la comisión nacional.
Las aclaraciones del organismo estatal coinciden con la visita de Estado del Presidente Xi Jinping a EEUU, donde uno de los principales objetivos del mandatario es precisamente convencer a los inversores norteamericanos de que la economía del país asiático sigue siendo fuerte pese a su progresiva desaceleración.
La baja en las exportaciones y la crisis bursátil de este año han aumentado las dudas de los mercados sobre el futuro de la segunda economía mundial, que en los últimos años había sido una de las más estables y de mayor crecimiento en un contexto de crisis financiera global.