José Luis Rissetti, El Mercurio
SANTIAGO.- La mayoría de las regiones del país, salvo la zona que agrupa Antofagasta y Atacama y la que reúne Coquimbo y Valparaíso, registraron alzas en sus tasas de ocupación hotelera en el tercer trimestre de este año, según un reciente informe de Tinsa HTL.
La paralización o detención de proyectos mineros y energéticos impactaron el hospedaje en Antofagasta y Atacama, regiones donde la ocupación alcanzó 60,8%, lo que representa un descenso de 8,5 puntos porcentuales respecto del mismo período de 2014, indica
"El Mercurio".
El documento detalla que la razón anterior y el hecho de que también -según administradores hoteleros- hubo despidos masivos de funcionarios mineros y disminución de faenas, son los factores que estarían explicando el retroceso. En efecto, se han reducido en 10.200 los puestos de trabajo en los últimos 12 meses según el INE.
"La baja del empleo en minería es una tendencia que se viene observando hace un par años, junto con la caída del precio y las consecuentes estrategias de reducción de costos que han venido implementando las empresas mineras", señalan desde el Consejo Minero.
Pablo Ramírez, director de Tinsa HTL, explica que justamente la caída se debe al público corporativo, que es el más importante que viaja a esas regiones y que trabaja en el rubro minero.
El presidente de Hoteleros de Chile, Colin Turner, comenta que Antofagasta y Calama son destinos que dependen principalmente del huésped corporativo, pero que Iquique, por ejemplo, es una zona que tiene la ventaja de tener también un atractivo turístico. A su juicio, esta ciudad debiera contar con una importante promoción para atraer al público limítrofe y nacional.
Pero la contracción de la minería no solo ha impactado a la ocupación, sino también a las inversiones. A septiembre, había 11 proyectos hoteleros en carpeta en el norte del país, pero solo dos de esos estaban en construcción: un Ibis y un Ibis Budget, que son hoteles económicos, más resistentes a los vaivenes de la economía.
En Santiago, la ocupación hotelera creció 7,1 puntos porcentuales el tercer trimestre respecto del mismo lapso de 2014, y todas las regiones del sur mostraron avances. Ramírez señala que el crecimiento en la capital se explica por una mayor demanda en julio por la final de la Copa América y por el atraso de la temporada de esquí, en la que suelen llegar muchos brasileños y que este año calzó justo en el tercer trimestre.